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Dos meses después del inicio de la guerra en Ucrania, el presidente ruso, Vladímir Putin, mantiene un elevado apoyo ciudadano. El instituto Levada, el único independiente del Gobierno que queda en Rusia, le otorga una aprobación de entre el 70% y el 80%, una cifra siempre con matices en un país que prohíbe las manifestaciones contra la invasión. El cierre impuesto a los medios críticos ha laminado el acceso en Rusia a cualquier narrativa distinta a la oficial en radio, televisión y en buena medida también en internet. A pesar de la propaganda, una parte de la ciudadanía percibe que las cosas no marchan como Putin les dijo cuando anunció la "operación especial en Ucrania".

Foto: El presidente ruso, Vladímir Putin, durante la celebración de la Pascua ortodoxa en Moscú (Alexander NEMENOV/AFP)

Los ucranianos han tratado de mantener las tradiciones de la Pascua ortodoxa a pesar de la guerra y de que numerosos templos han resultado dañados o destruidos en estos dos meses, sobre todo en el este y el norte del país. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha lanzado un mensaje de ánimo a sus compatriotas desde la catedral de Santa Sofía de Kiev. También el presidente ruso, Vladímir Putin, ha asistido en Moscú a la misa de la Pascua de resurrección. No ha habido tregua en Mariúpol, donde la artillería rusa ha seguido golpeando la acería de Azovstal, último foco de resistencia de la ciudad, que está prácticamente destruida.

Foto: Soldados ucranianos celebran la Pascua ortodoxa cerca de Járkov (EFE/EPA/STR)

Se cumplen dos meses del inicio de la guerra y el ejército ruso sigue atacando intensamente tanto el sur como el este de Ucrania. Los bombardeos se han repetido sobre la región de Lugansk, donde al menos ocho personas habrían muerto, según ha asegurado el gobernador de la región, Serhiy Gaidai. Rusia continua llevando a cabo ofensivas terrestres a pequeña escala en múltiples puntos a lo largo del frente, desde Izyum hasta el óblast de Zaporiyia, según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW). También habrían seguido presionando las instalaciones de Azovstal en Mariúpol, donde resisten cientos de fuerzas ucranianas. La situación sigue siendo crítica en la ciudad portuaria y los nuevos intentos por evacuar a los civiles habrían fracasado.

La ciudad de Mariúpol, al sur de Ucrania, ha quedado destruida tras dos meses de guerra y una dura defensa de los soldados ucranianos. La ciudad portuaria del Mar de Azov tenía 400.000 habitantes antes de la invasión rusa, que hablaban tanto ruso como ucraniano, pero la mayoría han huido o han muerto.

Foto: Azov/vía REUTERS

Járkov es la segunda ciudad de Ucrania. Era una urbe cultural y vibrante hasta que comenzó la guerra y empezó a ser asediada por el ejército ruso con fuego de artillería y bombardeos. La conquista de Járkov es crucial para las aspiraciones militares del presidente ruso, Vladímir Putin. La gente no sale de sus casas o directamente se han mudado a los refugios antiaéreos. Es lo que ha hecho la artista visual Olia Fedorova, quien prefirió quedarse en su ciudad para defenderla como mejor sabe, creando.

Foto: Un edificio afectado por proyectiles de alto calibre en Járkov (EFE/Miguel Gutiérrez)

Nos hemos acostumbrado a que el chef asturiano José Andrés esté presente en las catástrofes humanitarias para servir un plato de comida caliente a las vícitimas. Su ONG World Central Kitchen se fundó en 2010, para responder a la escasez de alimentos como consecuencia del terremoto de Haití. Hoy, el famoso chef se asoma al Canal 24 Horas de Televisión Española para contarnos cómo funciona esta organización, desde la ciudad ucraniana de Zaporiya.

FOTO: El cocinero español José Andrés en un espacio situado en la ciudad de Leópolis, en el oeste de Ucrania. EFE/Isaac J. Martín

Las fuerzas rusas han reanudado los ataques aéreos y están tratando de asaltar la acería de Azovstal, donde resisten las fuerzas ucranianas que quedan en la ciudad asediada de Mariúpol. El asesor presidencial ucraniano Oleksiy Arestovych ha asegurado que los defensores de la ciudad están resistiendo a pesar de la difícil situación y que las tropas ucranianas incluso están llevando a cabo contraataques. En la planta Azovstal se encuentran unos mil civiles y militares ucranianos, de los cuales unos 500 están heridos.

Los tropas rusas rodean la acería de Azovstal, de donde Putin ordenó que no entrara ni una mosca. Dentro, moviendose por sus laberínticos túneles, milicias uranianas y un millar de civiles. Son imágenes de un video difundido por el propio batallón de Azov, los ultraderechistas que resisten en la acería.

FOTO: Un grupo de niños, junto a un militar ucraniano en el interior de la acería de Azovstal, en Mariúpol. FOTO: Azov Battalion/Handout via REUTERS

Combatientes y civiles resisten en el interior de la acerái de Azovstal, en la ciudad sitiada de Mariúpol. Estas son imágenes del interior. Muchos dicen que quieren irse a casa, que echan de menos a sus familias, pero de momento el Ejército ucraniano rechaza la oferta de Vladímir Putin de un alto al fuego para evacuarles a cambio de la rendición de sus soldados. Se están repartiendo regalos entre los más pequeños y organizando el suministro de comida. Llevan atrapados, rodeados por las tropas rusas, desde el 2 de marzo.

FOTO: Soldados prorrusos patrullan frente a un edificio destruido en la acería de Azovstal, en Mariúpol. REUTERS/Chingis Kondarov.