Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

De una idea del artista chileno Alejandro Jodorowsky a la implicación al otro lado del mundo del actor español Miguel Ángel Silvestre. La asociación Reforesta nos propone plantar un árbol el sábado para salvar el planeta. El portavoz Miguel Ortega nos habla de esta iniciativa global, pensada para ser llevada a cabo en todo el mundo. 

Hace unos días en Planeta vivo nos hacíamos eco del llamamiento de Naciones Unidas a actuar para revertir la crisis climática. La ONU instaba a los líderes y mandatarios políticos a acudir a la cumbre sobre el clima del próximo 23 de septiembre de Nueva York con planes concretos en lugar de discursos bonitos. Ahora, una comisión internacional de científicos y expertos de la ONU urge a un cambio en la alimentación y la agricultura para evitar 11 millones de muertes prematuras y sortear la catástrofe ambiental.

Este miércoles una historia muy bonita llega a Nueva York. La de la estudiante sueca de 16 años Greta Thunberg, referente del movimiento mundial para exigir medidas contra el cambio climático. Su embarcación con la que ha cruzado el Océano Atlántico, atracará en las costas neoyorkinas en donde será recibida por una flotilla de Naciones Unidas.

Barrios enteros de Yakarta se están hundiendo en el mar a un ritmo de entre uno y quince centímetros al año."Puedes ver el agua subir con tus propios ojos", dicen en esta megalópolis de 10 millones de personas. Dejará de ser la capital de Indonesia, ha anunciado el presidente, porque ya no no soporta más población, polución y problemas de agua. La futura capital todavía no tiene nombre pero se sabe que estará en la isla de Borneo. El lugar elegido hoy es pura selva: no hay riesgo de terremotos, inundaciones o tsunamis. La construcción empieza el año que viene, va a durar una década y costará más de 30.000 millones de euros. En Asia, otras grandes ciudades viven acechadas por el aumento del nivel del mar. Ocurre en Bangkok, Manila, Shanghái y Pekín. En África, el agua creciente amenaza a Lagos, capital de Nigeria. Y en Europa, el Támesis sube a costa de Londres. En Estados Unidos, el agua crece peligrosamente en Houston, Nueva Orleans y la capital, Washington. Todo lo contrario a lo ocurrido en Brasil en 1960, cuando se cambió Río por Brasilia para impulsar la frontera agrícola y avanzar sobre el Amazonas.
 

Esta semana se cumple un año de las primeras protestas de Greta Thunberg, la joven activista sueca que ha hecho reverdecer el movimiento ecologista en todo el mundo. Un movimiento que un año después analizamos con Lucas Barrero, estudiante de biología y ambientales y fundador de Friday's for Future en Girona e Irene Rubiera, estudiante de derecho en la Universidad Carlos III y una de las coordinadores de Friday's for Future en Madrid.

Los árboles ralentizan el cambio climático. Esta labor gratuita de los bosques solo está asegurada hasta finales de siglo. Un equipo de investigadores de la Universidad de Stanford y de la Autónoma de Barcelona han medido el potencial de estos ecosistemas para transformar el dióxido de carbono en oxígeno. Según el estudio, esta capacidad forestal será incierta a partir del 2100 debido a la falta de nutrientes del suelo y la escasez de agua. Hablamos con César Terrer Moreno, autor principal de la investigación.

Un grupo de científicos colocará el próximo domingo una placa en la cumbre de un volcán donde hasta hace poco tiempo estaba un glaciar, el primero que ha desaparecido en Islandia por culpa del cambio climático. Un fenómeno que no es nuevo ni exclusivo de este país, porque, según ha explicado Francisco Navarro, Catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid y Presidente de la Sociedad Glaciológica Internacional (International Glaciológica Society, con sede en Cambridge), "cada pocas semanas desaparece un glaciar".

¿Qué hay detrás de un billete de avión de 10 euros? Aunque los vuelos baratos pueden cambiar el rumbo de cualquier persona dispuesta a sacar los pies de la brújula, también el del planeta. Las emisiones de CO2 a la atmósfera por culpa de las aerolíneas son mucho más preocupantes de lo que nos imaginamos. Nuestra compañera Celia Vidal ha hablado con colectivos ecologistas.

Luchar contra el calentamiento global y garantizar la seguridad alimentaria pasa, obligatoriamente, por cambiar el uso de la tierra -sobre todo en lo que a cultivos se refiere- y por tener nuevos hábitos alimenticios, entre los que están cambiar a una dieta menos carnívora y evitar el despilfarro de comida, que representa el 8% de los gases de efecto invernadero producidos por el hombre. Sin ello, los expertos advierten de que la meta del Acuerdo de París de mantener el calentamiento global muy por debajo de dos grados no podrá lograrse.

Víctor Viñuales, director de la fundación de ecología y desarrollo, ha analizado en '14 horas' el impacto del consumo de carne en el medio ambiente: "Cada vez que tiramos un trozo de hamburguesa estamos tirando 2.000 litros de agua".

También ha insistito en que "el impacto de la producción de la carne es muy grande" y que debemos ser conscientes de que "lo que es bueno para el planeta, es bueno para la salud".

Por último, ha dicho que "el consumo de carne roja y los alimentos procesados y refinados tiene más riesgo para la salud que el sexo no seguro, el alcohol o las drogas juntos".