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Una imagen como ésta no será un caso aislado, sino algo habitual dentro de pocos años si no ponemos remedio. Hasta un 80% de la población mundial ya se ve afectada por la falta de agua.

Los impactos del cambio climático, que afectan ya a todos los continentes y océanos, se van a agravar en este siglo, según advierten los expertos de la ONU en un informe publicado este lunes. La edición anterior, de 2007, le valió al grupo el Premio Nobel de la Paz, lo que no impidió que la reunión internacional de Copenhague, en 2009, para forjar un pacto contra el cambio climático, resultase un fracaso.

Más de 300 personas han participado esta tarde en un "scrabble" gigante en la Plaza de Oriente para formar mensajes contra el cambio climático en la celebración madrileña de "La Hora del Planeta", que ha dejado a oscuras edificios emblemáticos como la Puerta de Alcalá o la Catedral de la Almudena.

El cambio climático elevará 3 grados la temperatura estival en España, según destaca un estudio internacional que asegura que los termómetros se situarán muy por encima de los 40 grados en las regiones que ya sufren algunas de las temperaturas más altas de Europa, como España, Portugal y Francia.

La comisaria europea de Cambio Climático, Connie Hedegaard, ha señalado que "España necesita urgentemente una reforma energética" y ha puesto como ejemplo el aumento de la factura de electricidad que ha sufrido el país en los últimos años y su dependencia de la importación de combustibles fósiles. Al respecto ha apuntado que España se gasta más de 60.000 millones al año en esta importación, "lo que supone un 4% del PIB que se va fuera de España". "Esto es una muestra de lo que pasa en Europa, necesitamos reformar la política energética y climática. Lo que se pretende con el paquete creado por la Comisión para 2030 es no depender de esta importación con precios impuestos por otros países. Esto ayudaría a bajar las facturas energéticas y a crear puestos de trabajo que tanto necesitan países como España". Acerca del fraking, Hedegaard ha explicado que la Comisión Europea no es "quien para decidir si un país debe practicar fraking o no debe hacerlo". Así, ha apuntado que, si alguno se muestra a favor de esa práctica lo que hace la Comisión es "aconsejarle". "Por ejemplo, entre nuestros consejos está que si se practica el fracking se haga con transparencia y se explique a la ciudadanía los químicos usados", ha concluido.