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El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha vuelto a ordenar la busca y captura de los tres militares estadounidenses imputados en la muerte del cámara de televisión, José Couso. El juez quiere que los extraditen a España para interrogarles por la muerte del periodista y pide permiso al Poder Judicial para viajar a Irak a reconstruir los hechos.

El Tribunal Supremo considera que el bombardeo en el que falleció José Couso es "penalmente imputable". Por ello, ha ordenado a la Audiencia Nacional que reabra la investigación por la muerte del periodista, que tuvo lugar en Bagdad el 8 de abril de 2003. El hermano de José Couso, Javier, cree que la reapertura del caso tiene "muchísima trascendencia". En este sentido afirma: "Que una campaña de ataque sistemático a civiles resulte imputable o punible es un avance para todos los que creemos en la convención de Ginebra y en los Derechos Humanos" (27/07/10).