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Los rebeldes se van afianzando en la capital, Tripoli. 32 barcos con ayuda humanitaria esperan ante la capital para poder descargar. Y el secretario general de la ONU, Ban-ki Moon ha dicho que una misión internacional de paz, de cascos azules, debería ser la encargada de garantizar un nuevo Gobierno de reconciliación.

El secretario general de la ONU Ban Ki-moon ha manifestado su intencion de pedir al consejo de seguridad el despliegue de una misión de paz en Libia. Asegura que el país está en una fase decisiva .Mientras, la OTAN despeja el camino a los rebeldes para la toma del último bastión del régimen.

Los rebeldes creen que pronto toda la capital estará bajo su control. Su gobierno quiere establecerse ya en Trípoli. Por otro lado la escasez de electricidad y de abastecimientos empeora la situación. Allí está un equipo de Televisión Española.

Mientras los rebeldes preparan la transición democrática en Libia, lo que más teme la comunidad internacional es que se repita lo que pasó en Irak. La mala gestión de la postguerra hizo que se descontrolara la seguridad y que aumentara la presencia de grupos terroristas.

Una bomba ha estallado en la sede de Naciones Unidas en la capital de Nigeria, Abuja. La explosión, que ha provocado una columna de humo sobre el edificio, ha destruido toda una sección del mismo.

La cifra de víctimas no es clara aún, aunque fuentes médicas presentes en el lugar hablan de al menos 10 muertos. Unas cincuenta personas han sido trasladadas al National Hospital de la capital, según han confirmado a Efe por teléfono fuentes del centro hospitalario. Se teme que pueda haber personas atrapadas entre los escombros.

Fuentes de los servicios de seguridad hablan de un vehículo conducido por un suicida que habría penetrado en la sede. Los restos de un vehículo eran visibles en el sótano.

Los rebeldes libios han desplazado su gobierno transitorio a Trípoli para intentar comenzar a gestionar el país mientras continúan luchando contra los fieles a Gadafi.

"Proclamo el comienzo del trabajo del ejecutivo en Trípoli", ha declarado Ali Tarhouni, miembro del Consejo Nacional de Transición (CNT) desde la capital. El movimiento es visto como un paso crucial para evitar divisiones en el país, fragmentado por diferencias regionales y tribales, principalmente entre el oeste (Trípoli) y el este (Bengasi, hasta ahora sede del CNT).

En una entrevista, Tarhouni ha subrayado que el nuevo gobierno espera reiniciar las exportaciones de petróleo en un plazo de dos o tres meses, y volver a la máxima producción en un año. Mientras Gadafi volvía a dirigirse a sus seguidores para pedirles que libraran las calles de las "ratas" de la oposición, las esperanzas de un final rápido a los seis meses de guerra se están viendo frustrados. En Trípoli, un número indeterminado de combatientes pro-gubernamentales, posiblemente algunos centenares, según Reuters, continúan disparando en las calles y asediando a los rebeldes. Incluso han bombardeado el aeropuerto, que está en manos de la oposición.