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El ffotógrafo ha contado como fueron sus seis semanas de cautiverio en Libia, retenido por el régimen de Gadafi. El periodista liberado hace dos días ha llegado este mediodía a Madrid.

Aviones de la OTAN han hundido ocho navíos de la Armada Libia en ataques coordinados desarrollados en los puertos de Trípoli, Al Khuma y Sirte, según ha informado la Alianza en un comunicado. "La OTAN y las fuerzas aéreas aliadas han continuado sus ataques aéreos de precisión contra las fuerzas del régimen pro-Gadafi durante la pasada noche con un ataque coordinado en los puertos de Trípoli, Al Khums y Sirte", señala la nota para añadir que los aviones de la OTAN han alcanzado a los navíos de guerra, "hundiendo a ocho de ellos". Este jueves, mientras la OTAN bombardeaba los navíos de la Armada Libia, la televisión estatal ha mostrado imágenes del dictador, vestido de negro y con gafas de sol, conversando con gesto relajado con el enviado del Gobierno a Rusia, Mohamed Ahmed Al-Sharif.

El fotógrafo Manu Brabo ha sido liberado después de pasar un mes y medio retenido en Libia. El reportero envió el último mensaje a su cuenta de Twitter el pasado 4 de abril, hablaba de ir a ver a los "jóvenes rebeldes". Viajaba en coche con dos periodistas estadounidenses y uno sudafricano por una carretera, cuando fueron asaltados por las fuerzas leales a Gadafi. El segundo cargo de la Embajada de España en Libia, Diego Ruíz, viajó a Trípoli para llevar de cerca las negociaciones. Brabo había sido detenido por haber entrado de forma ilegal en el país.

La calma regresa a la prisión de Salé, en Marruecos, después de que este lunes se produjera la revuelta de decenas de presos salafistas, contra la decisión de ser dispersados por otras cárceles del país. Se trata de la prisión que más presos islamistas alberga en Marruecos. Hubo varios heridos entre los presos y las fuerzas de seguridad. Un centenar de presos salafistas fueron liberados el pasado abril, dentro del proceso de reformas emprendido por el rey Mohamed VI, pero tras al atentando en Marrakesh, se teme que haya parado la distensión iniciada por Rabat.

Dos centenares de antidisturbios han intervenido para acabar con el motín de unos 300 presos islamistas en Marruecos, en la cárcel de Salé. Los amotinados habían retenido a cinco rehenes. La revuelta, que comenzó en la tarde de ayer, podría estar ya controlada.