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La Fiscalía de Cantabria ha pedido, como media cautelar, que los cuatro menores investigados por acosar a un compañero del instituto Torres Quevedo de Santander, un estudiante con discapacidad, no puedan acercarse al menor, a su domicilio o al centro educativo ni comunicarse con él.

En un escrito remitido a los medios de comunicación, la Fiscalía de Menores de Cantabria señala que investiga este caso como posible delito de lesiones o maltrato de obra y de discriminación.

Golpes, empujones y burlas... Cuatro alumnos han agredido a un compañero con parálisis cerebral en Santander. Su madre encontró los videos en el móvil. Al parecer, la joven víctima, según ha declarado su madre, "nunca había manifestado nada y tenía miedo a sentirse apartado y no estar integrado en su grupo".

La familia ha denunciado y el caso está en manos de la Fiscalía de menores. El centro ha expulsado cinco días a los agresores y educación ha abierto el protocolo antiacoso, pero la madre se queja de que, por ahora, siguen todos en la misma clase: "La opción que me pueden dar es que haga un escrito en el que yo ponga que no estoy de acuerdo con esos niños y entonces cambiarían a mi hijo de clase".

De momento, la víctima cuenta con un técnico que lo acompaña dentro del centro. La Consejería dice que para tomar más medidas tiene que esperar a que se resuelva la denuncia. Compañeros del menor se concentrarán mañana. Piden que no vuelva a ocurrir.

Más de 250.000 menores sufren acoso escolar. Los padres de las víctimas denuncian que los centros educativos no aplican los protocolos y piden una ley que convierta en delito los casos recurrentes. Esta semana han llevado su mensaje al Congreso.

Fede Cardelús entrevista a Carolina Alonso, presidenta de Convives, una asociación sin ánimo de lucro que tiene como misión contribuir a alcanzar una convivencia social positiva en las diferentes etapas educativas.

La Fundación ANAR cumple 30 años ayudando a niños, niñas y adolescentes a superar diferentes problemas a los que se enfrentan, como casos de acoso relacionados con la salud mental, el abuso o la violencia sexual. Lo hacen a través de una línea gratuita y confidencial, disponible las 24 horas del día los 7 días de la semana. Diana Díaz es la directora de esta Línea de ayuda y ha estado en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní para hacer un balance de su actividad.

Díaz ha contado que en estas tres décadas han recibido hasta 6 millones y medio de llamadas y han ayudado a 227.087 niños: "Muchos de ellos están sufriendo problemáticas muy duras, situaciones de violencia, de salud mental. Entornos que a veces no favorecen mucho el desarrollo y el crecimiento de estos niños", explica.

La directora de la Línea de ayuda ha destacado los cambios que se han dado a lo largo de estos años a nivel social y legislativo: "Las leyes han conllevado una mayor sensibilización y concienciación de riesgos, como situaciones de acoso escolar, violencia de género o agresiones sexuales [...] Antes no existía conciencia social de que la infancia y la adolescencia tuvieran problemas", sentencia.

Alejandro Palomas nos trae 'El día que mi hermana quiso volar', un libro que escribió tras la muerte de su madre, su "primer y último gran duelo". "Una de las cosas que uno aprende cuando pierdes a alguien así es que lo demás son pérdidas menores", nos cuenta en 'Las Mañanas de RNE' con Josep Cuní. "Cuando hay dos mellizos y uno muere, ¿el otro sigue siendo un mellizo o se llama de otra manera?" es una de las reflexiones que nos deja. "Estamos constantemente poniendo etiquetas, como "la viuda de". Tenemos esa tendencia a ser lo que queda de lo que fuimos, no lo que queda de lo que podemos convertirnos", expresa Palomas. Reflexionamos sobre la adolescencia, la salud mental, la muerte y el acoso escolar, "temas de los que nadie quiere hablar". "La mejor forma para introducir estos temas y cambiar socialmente es la ficción", explica el escritor.

En España se producen cada año 300.000 casos de acoso escolar. El bullying es una pesadilla para cada una de esas 300.000 víctimas y, si no se le pone freno, les marcará de por vida. Si hay acosados es porque hay acosadores, desde Infantil y Primaria hasta Secundaria.

La Fundación ANAR y la Fundación Mutua Madrileña han publicado un informe en el que alerta de que 1 de cada 10 jóvenes es víctima de acoso escolar. Y los compañeros son conscientes, casi la mitad de ellos no hacen nada para frenarlo. En 24 horas de RNE, hablamos con Graciela Sánchez, responsable de Educación de la Fundación ANAR, quien ha expresado su preocupación por estos datos: "Siguen siendo unas cifras alarmantes. Y eso implica que tenemos que seguir trabajando toda la sociedad para hacer charlas que sensibilicen y prevengan. Y también intentar que el alumnado sea cada vez más capaz de pedir ayuda, no solamente para sí mismos, sino también para otros".

También ha subrayado la gravedad del acoso psicológico y de la sutileza con la que se da: "El acoso psicológico hace muchísimo daño. Todo lo que es agresión verbal, la difusión de rumores o el aislamiento son conductas que tienen consecuencias graves a nivel de secuelas psicológicas".

Del mismo modo, ha comentado que es esencial educar en el uso de las nuevas tecnologías, pero no solamente en el conocimiento práctico o en medidas de autoprotección, sino también enseñar a los menores de edad el concepto de ciudadanía digital. "Lo que no haríamos en persona, no se puede hacer a través de las redes sociales", ha concluido Graciela Sánchez. Escuchar entrevista completa en RNE Audio.

Casi la mitad de los alumnos, un 47 %, según la Fundación ANAR, reconoce que no actúa ante los casos de acoso escolar que sufren sus compañeros, mientras que un 9,4% afirma que él o uno de sus amigos es víctima de acoso escolar presencial o digital. El bullying tiene más incidencia entre los 11 y 12 años y es muy similar entre chicos y chicas. Por otra parte, los insultos, motes y burlas son el tipo de acoso escolar más frecuente, seguido del aislamiento y las agresiones físicas.

Casi la mitad de los alumnos reconoce no hacer nada si uno de sus compañeros sufre acoso escolar. Este silencio de una buena parte del entorno de las víctimas de bullying es uno de los datos más preocupantes del VI Informe “La opinión de los estudiantes” de la Fundación ANAR y Fundación Mutua Madrileña, basado en las respuestas de más de 9.300 alumnos/as de entre 11 y 14 años y de 454 profesores/as de centros docentes de diferentes comunidades autónomas. Entre los datos positivos: el 71% de los estudiantes perciben que los profesores cada vez intervienen más. Benjamín Ballesteros, director técnico de Fundación ANAR, recuerda que hay que implicar tanto a alumnos como a profesores y a familias: "Un caso de acoso escolar ha de ser considerado un problema de toda la clase".