Mi Goya por un escenario

• Muchos de los actores nominados no abandonan las tablas
• Bárbara Lennie e Israel Elejalde han protagonizado Misántropo
• Javier Gutiérrez y Carmen Machi actúan en Los Mácbez

Israel Elejalde y Bárbara Lennie, en 'Misántropo'.

Todos los que lo han pisado coinciden en algo: un escenario no se cambia por nada. ¿Acaso por un Goya? No les hemos lanzado la pregunta a los 23 actores que optan al galardón (en el caso de Bárbara Lennie, a dos), pero podemos intuir las respuestas con solo echar un vistazo a la cartelera teatral.

Confesaba Candela Peña en la presentación del montaje La piel del huevo te lo da que no sabía porqué, en lugar de tanto cine, no se había dedicado al teatro “si había nacido para ello”. Puede que ver sus tres Premios Goya (Te doy mis ojos, Princesas, Una pistola en cada mano) le sirva para repensar la afirmación, pero no hay que ser tan radical en la respuesta: nadie les obliga a decantarse por un medio u otro, aunque puede que la intensidad y dedicación a un proyecto teatral acaben inclinando la balanza.

Macarena Gómez en Las dos bandoleras, Yolanda Ramos como La cavernícola, José Sacristán en El loco de los balcones, Eduard Fernández junto a Lluís Homar en Adreça desconeguda (Dirección desconocida)… Repasar la lista de aspirantes en las categorías de intérpretes protagonistas, de reparto y revelación, viene a ser como recordar un buen año de teatro y como ejemplo, dos títulos: Los Mácbez y Misántropo, montajes escénicos con actores que suman cinco candidaturas a los Goya, y dos premios Feroz de la Asociación de Informadores Cinematográficos y dos premios Forqué a Javier Gutiérrez y Bárbara Lennie.

Barbará Lennie, una vida sobre las tablas

La cosecha recogida por ella en 2014 está marcada por el talento, la meticulosidad, el riesgo y la agenda: El niño, Magical girl, El niñoMagical girlMurieron por encima de sus posibilidades y Stella cadente (por la que ha obtenido candidatura a los Gaudí de cine catalán) para muchos convierten a Lennie en la chica de moda, pero que ninguno olvide que lleva muchos años trabajando para quedarse frente a la cámara quien podría emular a Verónica Forqué, única intérprete que en una misma edición de los Premios de la Academia, en 1987, logró los dos a los que optaba por La vida alegre y Moros y cristianos.

Cine, televisión (a punto está de estrenar los ochos episodios de El incidente, junto a Marta Etura) y siempre el teatro, lugar donde se refugia. En concreto lo hace en el seno de Kamikaze Producciones, donde se reencuentra con los habitantes de un marco bello que se han esmerado en cuidar los que estrenaron, hace cinco años, La función por hacer, de Miguel del Arco y Aitor Tejada.

Este año es ella, Premio El ojo crítico de Cine 2009, quien experimentará la doble ración de nervios de Antonio de la Torre, cuyos trabajos en cine reconocidos por sus compañeros le han valido doble papeleta en una misma edición de Premios de la Academia: en 2013, por Grupo 7 e Invasor; en 2014, por Caníbal y La gran familia española. El sábado 7 de febrero, por su trabajo en La isla mínima, el actor malagueño estará atento al nombre que salga del cuarteto compuesto junto a Eduard Fernández (El niño), José Sacristán (Magical girl) y Karra Elejalde (Ocho apellidos vascos).

Javier Gutiérrez y Luis Bermejo, mano a mano

Javier Gutiérrez y Luís Bermejo han labrado parte de su trayectoria coincidiendo en teatro, formando equipo con Animalario y viéndose los dos a solas en El traje.

Y hablando de parejas, Gutiérrez no entiende su trabajo, y posterior reconocimiento, sin Raúl Arévalo (que se estrenó como director teatral con Nosotros 2023): juntos se retroalimentan en las pesquisas policiales por la Baja Andalucía mientras que Bermejo, de gira con Jugadores, persigue a toda costa cumplir el sueño de su hija en la película dirigida por Carlos Vermut.

Los Mácbez, el primer Macbeth que hace reir

Javier Gutiérrez estrenó Los Mácbez en marzo de 2014 en Narón, muy cerca de su querida tierra ferrolana. Como señora Mácbez, Carmen Machi, candidata por Ocho apellidos vascos con un personaje que apuntala las andanzas del sevillano y la vasca a los que dan vida Dani Rovira y Clara Lago con Karra Elejalde como padre en la ficción, y mucho teatro en vena: Karra abandonó por proyectos cinematográficos la gira de El nombre de la rosa (donde también debutó el cinematográfico Juan José Ballesta), Clara estrenó en la pasada temporada La Venus de las pieles, y Dani, siempre que puede, retoma su ¿Quieres salir conmigo? representado en toda España y mucho en Cataluña, donde ha coincidido en cartelera con David Verdaguer, también en la categoría de intérprete revelación por 10.000 Km.

Mercedes León, de veterana teatral a actriz revelación

Entre los que no se bajan de las tablas, una veterana recién ‘revelada’: solía decir Mercedes León que, en su vida, "lo había recibido todo del teatro", aunque mucho le deberá desde ahora a Alberto Rodríguez y la guardesa de La isla mínima. La escena como espacio sagrado, querencia por Andalucía y la furgoneta de su compañía Brea echaban para atrás el pensamiento de saltar al cine y la televisión, algo que hizo tiempo atrás Nuria González (Taitantos), con quien se inició en ensayos, estrenos y giras. Mercedes León disfruta de la candidatura como intérprete novel con la coherencia que otorga toda una vida dedicada al teatro.

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Es un caso similar al de Israel Elejalde, otro Kamikaze de Misántropo que disfruta los frutos de la que ha sido su primera participación en cine junto a compañeros de generación como Elisabet Gelabert. Las gracietas sobre su equis en las quinielas de la categoría ‘más joven’ se las toma con humor recordando, tras más de dos décadas de trayectoria, a actores que empezaron a engrosar esta nómina a edades avanzadas, como Walter Vidarte y Carlos Álvarez Novoa, con muchas horas de vuelo teatral al igual que la mayoría de candidatos a Goya en esta edición con mucha sustancia escénica.