Enlaces accesibilidad

Los sirios votan la nueva constitución de Asad en medio de un clima de preguerra civil

  • El nuevo proyecto de reforma se vota este domingo
  • El texto limita a dos como máximo los mandatos presidenciales
  • La oposición considera la convocatoria "un insulto"

Por
Los sirios votan la nueva constitución de Asad

Estaba convocado para marzo, pero el gobierno de Bachar al Assad decidió adelantarlo. Este domingo, al menos 14 millones de sirios de más de 18 años están llamados a votar en un referéndum que modificará la Constitución, introduciendo cambios, como la limitación de mandatos del presidente. Los centros de votación han abierto sus puertas a las 07.00 horas (06.00 en España penínsular) y no cerrarán hasta las 19.00 horas (18.00 en España), informa la agencia de noticias oficial Sana.

Para el profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Alicante, Ignacio Álvarez-Ossorio, el cambio de fecha responde a “un intento de apaciguar la situación y calmar los ánimos". "Lo que yo creo es que es difícil que contribuya a mejorar la situación sobre el terreno por la falta de credibilidad política”.

La oposición, que ha hecho un llamamiento al boicot, denuncia que el Gobierno está tratando de usar el referéndum para ocultar las “masacres”. El régimen, por su parte, defiende que la propuesta demuestra su posición reformadora.

Lo cierto es que el escenario para esa cita electoral resulta complejo. Desde hace más de 20 días, las fuerzas del régimen han lanzado una ofensiva sobre la ciudad de Homs para recuperar el control de la localidad. Cientos de personas han muerto, entre ellas, dos periodistas occidentales.

“Creo que efectivamente no se dan las circunstancias en el terreno de la seguridad ni las comunicaciones son 100% seguras. El boicot va a ser masivo, otra cosa es lo que digan los datos oficiales que serán oportunamente manipulados”, apunta Álvarez-Ossorio a RTVE.es.

Las reformas de la nueva Constitución

Por las calles de Damasco, miles de carteles invitan ya a la población a participar en la votación. “Es la primera vez que el mensaje se limita a invitar a los ciudadanos a acudir a las urnas, sin inducir a votar a favor de la Constitución”, ha manifestado a AFP el ministro de Información del régimen, Adnan Mahmud.

Los medios oficiales han destacado lo que llaman “principios democráticos” de ese nuevo texto constitucional, compuesto por 157 artículos divididos en seis títulos. Por un lado, limita los mandatos del presidente quien sólo se podrá presentar una vez a la reelección de manera consecutiva y ejercerá el cargo por siete años. El presidente tendrá también la potestad de formar el equipo de Gobierno.

Sin embargo, el artículo 188 precisa que estas disposiciones solo se empezarán a aplicar a partir de 2014, que es cuando termina el actual mandato de Bachar al Assad, lo que le permitiría presentarse dos veces más.

El documento establece que Siria es un estado “democrático y civil”, recoge el derecho a huelga, y el respeto a todas las religiones. No obstante, el presidente deber de ser musulmán, según el artículo 3, apunta Efe.

Pero quizás uno de los puntos más resaltados por el régimen es la anulación del polémico artículo 8 de la actual constitución de 1973 que establece que “el partido Baath es el dirigente del Estado y de la sociedad siria”. Con eso, aseguran sus redactores, se sientan las bases para de las “libertades políticas y el pluralismo político”.

Sin embargo, esto también tiene matices: los partidos no podrán basarse en la religión o en intereses regionales, lo que excluye, por ejemplo, a los Hermanos Musulmanes o a los partidos kurdos que quieren la autonomía.

Para el profesor Álvarez- Ossorio, “parecen más bien reformas cosméticas, un pluripartidismo que es más bien una liberalización política otorgada”.

“La gran novedad es que el Baath, el partido único, deja de ocupar ese monopolio, y a partir de ahora se admite un sistema pluripartidista, lo que ocurre es que es el régimen el que sigue controlando qué partidos son legalizados y qué partidos no. Con lo cual, los que serán legalizados son los más cercanos al régimen y todos los partidos de la oposición, incluyendo los Hermanos Musulmanes, siguen siendo ilegales” añade.

“Es un insulto”, dice la oposición

La oposición, por su parte, considera que la consulta es en sí misma “un insulto”, comenta a RTVE.es Muyahed Akel, responsable de comunicación de la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio (AAPS) en España. “Esa propuesta de modificar la Constitución no tiene ninguna validez y el espíritu es continuista, es decir, de continuar con la dictadura como si no hubiera pasado nada, como si no hubiera habido muertos, como si no hubiera habido represión”.

La modificación de la Constitución fue una de las demandas que pedían los manifestantes al inicio de las revueltas. Muyahed comenta que “en un principio lo que se pedía era reformas, apertura política, una democracia, pero ahora mismo, después de todos los muertos, después de toda la represión, después de que se ha visto cómo se bombardea a la población civil, ahora lo que se pide única y exclusivamente es derrocar al régimen”.

“Creemos que la participación va a ser irrisoria” añade. “Además, el derecho a la consulta solo lo tienen  los que están dentro, todos los ciudadanos sirios que estamos fuera no tenemos el derecho a votar la constitución. Los muertos que ha habido tampoco han tenido en su momento el derecho”.

Reunión de los “amigos de Siria”

Esta votación se produce dos días después de que la comunidad internacional haya dado una nueva vuelta de tuerca en sus presiones para obligar a Bachar al Assad a abandonar el poder.

En Túnez, este viernes se celebró una reunión de los llamados países “Amigos de Siria”, una cumbre en la que participaron más de 60 países, entre ellos, EE.UU., y otras organizaciones, pero con destacadas ausencias como la de China.

Allí, el principal grupo opositor en el exilio, el Consejo Nacional Sirio, pidió armas para la oposición y propuso unas líneas generales para una futura transición, con la creación de "un consejo presidencial formado por personalidades nacionales" y la formación "de un gobierno transitorio que se encargue de administrar los asuntos del país", según Efe.

El presidente tunecino, Moncef Marzuki, propuso una salida negociada del presidente sirio y de su familia mientras Estados Unidos endureció su mensaje hacia Al Assad: "Pagarás un alto precio por ignorar la voluntad de la comunidad internacional y por violar los derechos humanos de tu pueblo", dijo la Secretaria de Estado, Hillary Clinton.

Para el profesor Álvarez-Ossorio, esta cumbre ha mostrado  “un cambio de tono, de actitud de la comunidad internacional y sobre todo de EE.UU. Desde el boicot de Rusia y China en el proyecto de resolución de ONU, parece que la comunidad internacional empieza a plantear otras opciones, incluso, aunque no se diga abiertamente, la de armar al Ejército Libre Sirio (ELS) para acelerar la caída de Bachar al Asad.

Corredor humanitario

Una de las principales demandas en esta cumbre era la creación inmediata de un corredor para que las organizaciones humanitarias puedan llegar a los territorios más castigados por los combates. Ese mismo viernes, la Media Luna Roja consiguió entrar en el barrio de Baba Amro, en Homs para evacuar a los heridos, víctimas de los bombardeos de las fuerzas gubernamentales.

Las revueltas en Siria cumplirán en marzo su primer aniversario. El pasado jueves, la ONU denunció que tanto las fuerzas del régimen como las del opositor Ejército Libre Sirio están cometiendo graves abusos de derechos humanos, aunque matiza que es mucho mayor desde el bando oficial.

Las cifras de muertos, hasta el momento, son difíciles de precisar. Según el último balance ofrecido por la ONU son más de 5.000. Los Comités de Coordinación Locales, la oposición en el interior, hablan de más de 7.600 fallecidos, y el régimen asegura que han muerto más de 2.000 soldados y policías. Ninguna de estas cifras han podido ser contrastadas con fuentes independientes.