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La reforma educativa prevé un certificado escolar oficial para los que no terminen la ESO

  • Con este documento se certificará el nivel de conocimientos adquiridos
  • La reforma incluye cambios en cuarto de la ESO que tendrá tres opciones
  • Los cambios persiguen también evitar el abandono escolar o las repeticiones

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Los jóvenes que no logren terminar la ESO recibirán un certificado escolar

Un certificado de nivel para los alumnos que no obtengan el título de graduado al finalizar la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) es una de las principales novedades que introducirá la reforma que previsiblemente se aprobará este viernes en el Consejo de Ministros y que el Ministerio de Educación prevé para la Formación Profesional y el último curso de la ESO.

Se tratará de un certificado de carácter oficial del nivel de adquisición de las competencias o conocimientos alcanzados en esa etapa. Hasta el momento, los que no conseguía superar la ESO, no tenían ningún documento que avalase la formación recibida. Lo más probable es que a partir de junio de 2012, las comunidades autónomas empezarán a entregar dichos certificados.

Tendrán validez en toda España y permitirá al alumno la exención de parte de las pruebas para la obtención más adelante del título de graduado en ESO o para el acceso a ciclos formativos de grado medio, según 

determinen las administraciones educativas.

Otras novedades en cuarto de la ESO

También habrá otros cambios en el cuarto curso de ESO que tendrá tres opcionesdos orientadas al Bachillerato -letras y ciencias- y  otra a la Formación Profesional de grado medio, así como tres nuevas asignaturas: Alimentación, Nutrición y Salud, Ciencias aplicadas a la  actividad profesional e Iniciativa emprendedora.

De esta manera, el Ejecutivo quiere profundizar en el carácter orientador del último curso de la etapa obligatoria hacia el  Bachillerato o la Formación Profesional con tres opciones, aunque desde el Ministerio de Educación insisten en que sea cual sea la que se curse no condicionará al alumno a la hora de elegir el tipo de estudios postobligatorios, pues el título en ESO será el mismo para todos.

Así, habrá seis materias obligatorias: Educación Etico-cívica, Educación física, Ciencias sociales, Geografía e Historia, Lengua  castellana y Literatura --Lengua cooficial si la hubiere--, Matemáticas y una primera Lengua extranjera. Además de estas  asignaturas, los alumnos tendrán que elegir tres optativas, de tal forma que en total cursan hasta 10 asignaturas.

Las materias optativas (once) se ordenan en las tres opciones y un grupo de materias comunes. Por tanto, se establece la 'opción 1' (Educación plástica y visual, Latín y Música); 'opción 2' (Biología y  Geología, Física y Química y Tecnología); 'Opción 3' (Alimentación,  nutrición y salud, Ciencias aplicadas a la actividad profesional y Tecnología).

Además, se define el grupo de materias comunes a todas las opciones (Informática, Orientación profesional e iniciativa  emprendedora y Segunda lengua extranjera).

Por tanto, el alumno puede elegir las tres materias de una opción concreta, dos materias de una opción y una tercera del grupo de las materias comunes o, incluso, dos materias de una opción y una tercera de otra opción.

En respuesta a las reclamaciones de algunas comunidades autónomas, que alegaban que los centros escolares pequeños, es decir, los que  tienen una clase por curso, no podían impartir las once materias  optativas, Educación ha determinado que estos centros oferten siete,  dos asignaturas por cada opción y una del grupo de materias comunes.

Evitar la repetición de curso

Pero no es la única novedad. El real Decreto de reforma, que comenzará a aplicarse en el curso 2012-2103, también trata de flexibilizar el sistema educativo para que nadie lo abandone sin la formación imprescindible y también trata de evitar la repitición de curso.

Para ello, los Programas de Cualificación Profesional Incial (PCPI), no se limitará solo a los alumnos de 16 años que no hayan obtenido el título de graduado en ESO. También podrán acceder los jóvenes de 15 años, siempre que se considere que es la mejor opción para finalizar la etapa obligatoria e intentar que continúen sus estudios.

Serán los alumnos y sus padres o tutores los que decidan si van al PCPI a la vista de las recomendaciones de los docentes, orientadores y dirección del centro. Según fuentes ministeriales, así se evitaría que repitieran curso, pues les derivarán a este tipo de formación, que además puede estar orientada a un puesto de trabajo concreto.

Asimismo, desde el Ministerio  argumentan que con esta medida se puede reducir el alto porcentaje de repetidores que hay en España, donde el 15 por ciento del alumnado ha repetido ya dos veces y un 24 por ciento lo ha hecho una vez. Por tanto, se trata de conseguir que antes de que cumplan los 16 años, los alumnos tengan una opción más de formación y no abandonen el sistema educativo.

Esta formación durará dos años y estará conformada por módulos obligatorios específicos asociados a la cualificación profesional de nivel 1; otros formativos de carácter general para poder seguir FP de grado medio; y unos adicionales voluntarios para obtener el título de ESO.

Cursos on line y de especialización

La reforma incorpora también cursos de especialización para titulados de FP y un incremento de la oferta semi-presencial o a distancia de la plataforma "on line" del Ministerio de Educación, en la que habrá un centenar de títulos al terminar 2011.

Las administraciones educativas podrán ofrecer módulos profesionales parciales; y se evaluará la formación de las empresas para mayores de 20 años que sea compatible con el trabajo.

Los centros podrán organizar programas formativos "a la carta" para mayores de 17 años que dejaron la escuela sin cualificación profesional, que podrá ser en colaboración con las empresas por acuerdos con las administraciones laborales.

Formación profesional

Por otro lado, la reforma incluye la preferencia de los graduados de ESO y Bachillerato frente a otros alumnos para matricularse en FP de ciclo medio y superior, respectivamente, cuando los centros reciban más solicitudes que plazas disponibles, según la reforma que aprobará el Consejo de Ministros mañana previsiblemente.

El Real Decreto de modificación de la FP, planteada por la Ley de Economía Sostenible, establece un curso "puente", con contenidos comunes del Bachillerato, para que los titulados de grado medio puedan acceder al superior. Hasta ahora, para cursar FP superior había que tener aprobado el Bachillerato (dos cursos) o acceder por una prueba.

La idea, según han apuntado este jueves desde el Ministerio de Educación, es que no haya vías cerradas, sino "pasarelas verticales y horizontales" que faciliten la continuación de los estudios.

Cuando la demanda sea superior a la oferta de plazas de FP superior, entre el 60 y 70 por ciento serán para los bachilleres; del 30 al 40 por ciento, para los de FP media que hayan superado el "curso puente"; y hasta un 10 por ciento para los que accedan por otras vías (prueba).

En las mismas circunstancias, los graduados en ESO tendrán preferencia para ocupar entre el 60 y el 70 por ciento de las plazas de FP media; del 30 al 40 por ciento serán para aquellos que hayan superado al menos los módulos formativos obligatorios de los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI); y hasta un 10 por ciento serán por concurso o prueba de acceso.