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El repentino giro que ha dado el Gobierno en la posición oficial que España ha tenido durante décadas sobre el Sáhara ha abierto un frente. Hoy varios grupos registrarán en el Congreso una petición para que Sánchez dé explicaciones. En Las Mañanas de RNE hablamos con Abdulah Arabi,  delegado del Frente Polisario en España, que asegura que se lo temían por la ambigüedad y tibieza mostrada por nuestro país, al que acusa de falta de visión estrategia por cerrar un frente con marruecos y abrir el de Argel.

El delegado del Frente Polisario en España habla de mazazo con el pueblo saharaui y explica que “la cuestión del Sáhara Occidental sigue siendo de descolonización y tiene que resolverse mediante el ejercicio libre y transparente del pueblo saharaui si quiere aceptar la autonomía que propone Marruecos o si quiere la independencia, se tiene que respetar. Es él el que tiene que decidir, no España ni nadie en su nombre. Y, añade, “España lo que hace es que se inclina que la opción de la autonomía podría ser la mejor opción, pero decide el pueblo. En este caso, España ha elegido al agresor.”

Abdulah Arabi cree que la decisión del Ejecutivo tiene una visión corta sobre los países del norte de África y que con ella no se está respetando el Derecho Internacional que tanto se reclama en la guerra de Ucrania.

Tras el cambio de posición de España sobre el Sáhara Occidental, la embajadora de Marruecos, Karima Benyaich, ha regresado a Madrid. Benyaich abandonó nuestro país en mayo del año pasado, después de que España acogiese al líder del Frente Polisario. Dos días después de que el Gobierno anunciase su apoyo a la propuesta marroquí de autonomía para el Sáhara, la embajadora ha regresado y comienzan a normalizarse la relación entre Marruecos y España. Algo que tensiona la diplomacia con Argelia.

Informa Ana Jiménez, corresponsal en Magreb

La embajadora de Marruecos en España ha regresado a Madrid casi un año después de que su Gobierno la llamara a consultas. La vuelta de la diplomática marroquí se produce dos días después de que España cambiara su política sobre el Sáhara occidental y apoyara la propuesta marroquí de autonomía para el Sáhara, por considerarla como la solución "más seria, realista y creíble" para resolver el conflicto.

FOTO: La embajadora de Marruecos en España, Karima Benyaich, en una imagen de archivo. EFE / Mohamed Siali

El cambio de postura del Gobierno respecto al Sáhara Occidental ha provocado que Argelia llame a consultas a su embajador en España. Los mensajes de Argel y Madrid son contradictorios. Argelia insiste en que nadie le informó de ese cambio y España dice que sí. Falta saber si se puede reconducir la situación o si estamos al principio de una crisis entre ambos países.

FOTO: Pedro Sánchez, durante su visita a Argelia en 2020.

Tras el giro de guion de la posición del Gobierno sobre el Sáhara Occidental, los ojos están puestos sobre Argelia, que ha decidido llamar a consultas a su embajador en Madrid. En las relaciones entre Argel y Madrid hay muchos intereses comunes, el principal son los 15 mil millones de metros cúbicos de gas al año que Argelia nos vende, casi la mitad del gas que consumimos.

El Gobierno insiste en que no hay riesgo de que Argelia decida cortar este suministro, ya que la relación con el país es "sólida", y el nuevo contrato de suministro con Naturgy está firmado para los próximos diez años. Además, como Marruecos, Argelia es clave para el control de la inmigración africana y la lucha contra el terrorismo yihadista. Por tanto, Argelia y España mantienen una relación de equilibrio delicada, que no se sabe qué rumbo tomará a partir de ahora.

Informa Gabriel Herrero

Argelia ha decidido llamar a consultas a su embajador en Madrid con efecto "inmediato" por el "cambio repentino" de posición del Gobierno de España sobre el Sáhara, según ha informado este sábado el Ministerio de Asuntos Exteriores argelino en un comunicado. La nota explica que el Ministerio de Exteriores argelino se ha visto "muy sorprendido" por el apoyo de España al proyecto de autonomía de Marruecos para el Sáhara, por lo que ha decidido llamar su embajador en Madrid "para consultas con efecto inmediato".

Argelia es el segundo país del que depende nuestro sistema de calefacción, después de Estados Unidos, y que mantiene un conflicto abierto con Marruecos. Sin embargo, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, expresaba: "Argelia es un socio fiable, un socio estratégico y un amigo de España".

Informa Isabel Jiménez, corresponsal en Marruecos

El Frente Polisario ha reprochado este sábado al presidente del Gobierno que haya utilizado al pueblo saharaui como "moneda de cambio" para retomar las relaciones entre España y Marruecos. El delegado del Frente Polisario en España pide al Ejecutivo que rectifique y que siga asumiendo su responsabilidad con el pueblo saharaui. En Marruecos, la prensa califica de "hito histórico" la nueva postura de España frente al Sáhara Occidental, incluso algunos analistas hablan de cesión por parte de España.

En 1975, España había iniciado un proceso de descolonización del Sáhara Occidental, Franco agonizaba y el rey de Marruecos, Hassan II, aprovechó para enviar a más de 300.000 civiles marroquíes a la frontera española. Ningún ejército se atravería a disparalos. TVE informó de aquella Marcha verde y de cómo Marruecos ocupó buena parte de miles de kilometros desérticos pero con grandes recursos naturales como la pesca y el fosfato. En 1976, España abandonó definitivamente el Sahara, el Frente Polisario proclamó, unilateralmente, la Republica Árabe Saharui y declaró la guerra a Marruecos.

En 1991, ámbas partes firmaron un alto el fuego con la intención de convocar una consulta sobre el derecho de autodeterminación. Marruecos puso problemas sobre el censo hasta que, en 2007 presentó un plan de autonomía y pasó a reclamar su soberanía sobre el Sáhara. Después de décadas de silencio, el año pasado, un grupo de saharuis ocupó una carretera en la frontera con Mauritania. El ejército marroquí entró, en una zona desmilitarizada para desalojarlos y el Polisario dió por roto el alto el fuego. En sus denominados "partes de guerra" informa de ataques y bajas. Pero Marruecos no ha reconocido que haya guerra en el Muro de Separación, el más largo del mundo, del Sahára Occidental.

FOTO: Integrantes de la Marcha Verde de 1975. EFE (Archivo).

El cambio de postura del Gobierno respecto al Sáhara occidental crea una nueva brecha entre los socios de coalición. Hoy la parte morada del ejecutivo mantiene su rechazo frontal a ese giro diplomático, mientras el ala socialista asegura que de este modo habrá una mejor relación con Marruecos. El PP dice que es una "temeridad".

El asunto del Sáhara no se abordó cuando se negoció el pacto de Gobierno, por lo que no había un compromiso al respecto entre las partes. Sin embargo, Unidas Podemos no está de acuerdo en que España acepte ahora el plan de autonomía para el Sáhara. Lo confirmó Yolanda Díaz y también lo ha dicho la diputada al Parlamento Europeo, Idoia Villanueva: "Cuando sembramos injusticias, terminamos recogiendo conflictos y consecuencias. España tiene una responsabilidad histórica con el pueblo saharaui", expresa.

Por otro lado, el futuro presidente de los populares, Alberto Núñez Feijóo, también se ha quejado de las formas y critica que Sánchez haya tomado esa decisión sin un acuerdo previo con los partidos. "Lamento profundamente que casi después de 50 años de acuerdo entre gobiernos de distintos colores, este acuerdo parlamentario no haya sobrevivido al presidente Sánchez", expresa Feijóo. También Ciudadanos y Vox piden explicaciones.

El Gobierno de Pedro Sánchez ha cambiado la postura que tradicionalmente mantenía España al aceptar el plan de autonomía de Marruecos sobre el Sahara Occidental, una antigua colonia española anexionada por su país vecino, con el que arrastra un conflicto desde hace casi 50 años para conseguir su independencia.

El contencioso sobre el Sahara Occidental comenzó en 1975 cuando Marruecos, aprovechando el proceso de descolonización iniciado por España, se anexionó este territorio tras traspasar su frontera con la llamada Marcha Verde.

FOTO: Una mujer muestra una bandera saharaui durante una manifestación en San Sebastián. EFE/Javier Etxezarreta