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Las últimas cifras provisionales divulgadas por Protección Civil de Haití indican que Matthew causó 473 muertos y 75 desaparecidos, dejó 339 heridos y obligó el desplazamiento de 175.000 personas, alojadas en 224 refugios. 100.000 niños están sin escuela.

Sin embargo, fuentes de organismos de socorro y autoridades locales aseguraban el viernes pasado que el número de víctimas mortales llegaba al millar.

Tras la devastación causada por el huracán MatthewHaití se enfrenta ahora a un rebrote de la epidemica de cólera, presente en el país desde 2010. Al menos 20 personas han muerto por esta enfermedad en la región sur y suroeste, según el Ministerio de Salud Pública.

La ONU ha hecho un llamamiento para recoger 120 millones de dólares (casi 109 millones de euros) para ayuda humanitaria, y países como EE.UU., Francia y España ya han enviado material.

Una semana después del paso del huracán Matthew, una amplia región de Haití continúa sumergida en la destrucción y demanda ayuda urgente para evitar el rebrote de enfermedades como el cólera, que mató a miles de personas tras el terremoto de 2010. Varios países como EE.UU, España o la vecina República Dominicana han enviado ayuda a Haití, pero la falta de infraestructura y de logística ha hecho que la misma se reparta a cuentagotas. Los afectados, que se cuentan por miles, se lamentan de la escasa o lenta ayuda. De acuerdo con la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), cerca de 30.000 personas en Jeremie no tienen acceso a agua potable.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha informado de que la provisión de agua potable entre las víctimas del huracán Matthew en Haití es la única manera de evitar una nueva epidemia de cólera en este país. Las zonas más dañadas por el huracán, situadas al sur del país, también son las más afectadas por las dificultades de aprovisionamiento y asistencia. El equipo de TVE dirigido por Almudena Ariza muestra imégenes del puente cuyo desplome tras el paso de Matthew interrumpió las comunicaciones terrestres en Haití obstaculizando el transporte de ayuda.

Al menos 100.000 niños se han quedado sin escuela en Haití como consecuencia del paso del huracán Matthew, que ha arrasado el sur del país, según datos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). En Cite Soleil, las condiciones sanitarias están reducidas al mínimo y el riesgo de cólera se dispara. Desde allí describe la situación la enviada de TVE Almudena Ariza. Unas 300 escuelas han sido destruidas total o parcialmente, mientras otras son usadas como albergue. Unicef intenta establecer aulas temporales. "Deben volver a clase tan pronto como sea posible. El huracán Matthew se llevó sus escuelas, hogares y libros de texto, no debe llevarse sus esperanzas", ha afirmado Jean Metenier, representante adjunto de UNICEF en Haití. Estados Unidos, Francia y España son algunos de los países que ya han enviado ayuda humanitaria. La sección española de Unicef ha destinado 100.000 euros al país caribeño para paliar las necesidades más urgentes.

Las autoridades de Haití han confirmado hasta la fecha la muerte de 372 personas, si bien las organizaciones no gubernamentales elevan la cifra a casi el millar. Las mayores dificultades las sufren en el sur del país, pero las necesidades básicas como el agua potable llegan también a los barrios más pobres de la capital, Puerto Príncipe. 

Javier Martos, director de Unicef España, cree que la comunidad internacional debe ayudar a "nuestros hermanos haitianos" tras el paso del huracán Matthew, que ha dejado oficialmente más de 300 muertos (un millar, según fuentes no oficiales) y a 100.000 niños sin escuela. Así lo ha explicado en una entrevista en Los desayunos de TVE.

Unicef ha hecho un llamamiento para reunir 5 millones de euros mientras la comunidad internacional cuantifica en 120 millones la ayuda inmediata para asistir al sur del país, la zona más afectada. No obstante, Martos ha pedido un "compromiso sólido" para que la ayuda sea "estructural".

La prioridad de las autoridades de Haití es llegar hasta las localidades más golpeadas y dar respuesta a los miles de afectados de la catástrofe, para evitar un eventual brote de cólera, como el que afectó al país tras el terremoto de 2010, lo que agravaría aún más la crisis humanitaria.

Haití tiene uno de los niveles de incidencia de cólera más altos del mundo y se estima que uno de cada tres afectados es niño. La amenaza de otras enfermedades que se transmiten a través del agua también es muy alta.

El último balance de fallecidos asciende a más de 1.000, según fuentes locales citadas por la agencia británica de noticias Reuters. Las autoridades haitianas solo han confirmado hasta la fecha la muerte de 336 personas.

Aunque se habla ya de más de 1.000 muertos, el balance no es definitivo, ante la dificultad para acceder a las zonas más afectadas poco o nada parece quedar ya, de la que antes se conocía como "la perla de las Antillas". No hay paz para un país como Haití. Junto a las bucólicas playas del Caribe, la miseria, la destrucción y la desesperación. Esta vez, el suroeste de la isla ha quedado casi borrado del mapa. La furia de Matthew ha dejado incomunicadas muchas aldeas. No tienen agua ni luz y la ayuda humanitaria llega con cuentagotas. Estos haitianos sacan un hilo de agua de una de las cañerías, al descubierto.

En las últimas horas, Matthew ha causado graves daños en Carolina del Sur y Carolina del Norte, con fuertes inundaciones y cortes de luz que han afectado a unos dos millones de personas. A su paso por Estados Unidos, el huracán ha provocado al menos diez muertos. A estas horas Matthew ha perdido ya intensidad y ahora es una tormenta tropical.

Haití necesita ayuda. El devastador huracán Matthew ha matado a cerca de 900 personas y un millón y medio de haitianos se han visto afectados. Muchos se han quedado en la calle. Según datos de naciones Unidas unas 350.000 personas están pendientes de recibir ayuda con urgencia y eso en un país que aún no se había recuperado del terremoto de 2010. Varias organizaciones se han puesto ya a trabajar para recaudar fondos.