Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El enviado especial de RNE, Fran Sevilla, explica que la ofensiva rusa en el Donbás continúa en distintos frentes. Uno de ellos, donde él se encuentra, es el de Siversk, al norte de la región de Donetsk, donde se registran duros combates y disparos de artillería. Aquí aún viven civiles, encerrados en sótanos.
En el camino hacia Siversk, el equipo de RNE ha sido testigo de cómo los ucranianos preparan nuevas defensas, cavan nuevas trincheras y se ejercitan en el tiro porque los rusos están a pocos kilómetros y avanzan hacia la localidad.

Foto: Trinchera en el frente de Bajmut. (AP Photo/Libkos)

Las fuerzas armadas ucranianas aseguran que sus tropas aún resisten en Bajmut, localidad de la región de Donetsk donde desde hace semanas se están produciendo los mayores combates de la guerra. El grupo de mercenarios rusos Wagner, que combate en este frente, había asegurado que las tropas ucranianas estaban cercadas.

Bajmut es un importante nudo de comunicaciones que comunica por carretera con Kramatorsk y Sloviansk, las mayores ciudades de la región de Donetsk aún controladas por las fuerzas ucranianas.

Foto: AP Photo/Libkos

A causa de la guerra, Ucrania tiene más de dos tercios del país minado, según las autoridades y organizaciones como Human Rights Watch. La mitad de sus víctimas son civiles que se encuentran con estas peliigrosas armas en caminos, zonas habitadas o incluso entre los escombros y que desconocen su funcionamiento. Calculan que su descontaminación podría llevar décadas. Foto: AP Photo/Thibault Camus.

Los soldados ucranianos trabajan contra reloj en Bajmut para frenar el avance ruso en la ciudad. Cavan nuevas trincheras, marcan posiciones y se preparan para unos combates cada vez más complicados por el cerco de Moscú. "Los rusos no pueden ir por carretera... eso les dificulta llegar. Nosotros estamos en casa y es más fácil", cuenta un soldado ucraniano. 

Las tropas ucranianas resisten en Bajmut, pese al aumento de la presión del ejército ruso, que avanza calle a calle en esta localidad de Donetsk. Kiev reconoce que la situación es muy preocupante y baraja, por primera vez, una retirada parcial en algunas zonas. Foto: AP Photo/Evgeniy Maloletka

Pasan las horas y la presión sobre la ciudad ucraniana de Bajmut es cada vez mayor. Las tropas rusas avanzan calle a calle. Kiev ha enviado unidades de élite, pero sus rutas de abastecimiento son muy limitadas. No obstante, el ejército ucraniano dice resistir los duros combates.

Foto: El ejército ucraniano dispara contra posiciones rusas cerca de Bajmut (Aris Messinis/AFP)

La guerra ha tensionado el sistema sanitario ucraniano y las organizaciones humanitarias han tenido que adaptarse a las necesidades de la población tanto en las zonas de guerra como en el resto del país, donde millones de personas han buscado refugio y necesitan asistencia médica. Según un informe de cinco ONG avalado por la ONU, el año pasado hubo más de 700 ataques a centros médicos, denegación de acceso a la atención sanitaria e interrupción de admisión de pacientes. Unos 200 sanitarios han sido asesinados, heridos, secuestrados o arrestados. Todo eso ha presionado al sistema sanitario, ya frágil antes de la guerra.

Foto: Un edificio de viviendas bombardeado en la ciudad ucraniana de Zaporiyia (REUTERS/Stringer)

Kramatorsk parece hoy más un centro militar que la gran ciudad industrial del este de Ucrania que era antes de que empezara la guerra. A menos de 20 kilómetros está el frente y muchos temen que si cae Bajmut, serán el siguiente objetivo. En la memoria de todos está el ataque ruso contra la estación del ferrocarril hace casi un año. Murieron 58 personas, todos civiles, por el impacto de un misil equipado con una ojiva de municiones de racimo.

Foto: Estación de tren de Kramatorsk (Dimitar DILKOFF/AFP)

Podría ser cuestión de horas o de pocos días para que la ciudad de Bajmut caiga bajo control ruso. La presión es cada vez mayor, según la Inteligencia británica. El ejército ucraniano dice resistir los duros combates. Kiev ha enviado unidades de élite a la zona, pero sus rutas de abastecimiento son limitadas. Bajmut está prácticamente destruida. El jefe del grupo mercenario ruso Wagner ha publicado un vídeo de soldados ucranianos muertos, antes de ser trasladados a territorio controlado por Kiev. Mientras, el ministro de Defensa ruso ha inspeccionado a sus tropas al sur de Donetsk. La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, se ha reunido por sorpresa con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en Leópolis, donde se celebra una conferencia sobre crímenes de guerra.

Foto: Un tanque ucraniano cerca de Bajmut (AP Photo/Evgeniy Maloletka)

El jefe del grupo Wagner, el oligarca ruso Evgueni Prigozhin, se ha dirigido en un mensaje de vídeo al presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, para comunicarle que Bajmut está "prácticamente rodeada" por las tropas rusas y que solo hay una carretera como posible vía de salida. La batalla de Bajmut es ya probablemente la más cruda de toda la guerra de Ucrania. Allí, el sonido de las detonaciones es continuo y atronador. En la localidad, totalmente en ruinas, permanecen unas 4.000 personas escondidas en sótanos, mientras las fuerzas rusas y los mercenarios del grupo Wagner están a punto de hacerse con la ciudad.

¿Cómo han sido los últimos días en Bajmut? Nos lo cuenta Anastasia Stanko, corresponsal de guerra ucraniana, que estuvo allí la semana pasada grabando un reportaje para Hromadske, el medio online para el que trabaja. A dos kilómetros de la localidad nuestro enviado especial Fran Sevilla nos cuenta que los periodistas ya no pueden entrar y que los rusos prácticamente la han cercado.

Andrii nos cuenta desde Kiev que desde hace semanas ya no ven drones volar como antes, porque las defensas aéreas han aprendido a derribarlos.

La foto la hace Elena Yanes en su primer viaje a Ucrania por el aniversario de la guerra.