Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El terrorismo islamista que representa Bin Laden no sólo ha golpeado a Estados Unidos. Su larga mano ha dejado víctimas y tremendas tragedias en todo el planeta

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha señalado en un comunicado hecho público esta madrugada, que la operación que ha terminado con la muerte de Bin Laden, ha sido posible gracias a una operación llevada a cabo la pasada noche. Bin Laden se encontraba en una mansión a unas dos horas de la capital de Pakistán, Islamabad, y la operación ha terminado con la muerte de otras cuatro personas, una mujer utilizada como escudo, dos colaboradores y uno de sus hijos.

Barack Obama ha aprovechado el acto de entrega de la medalla de honor a dos soldados caídos en la Guerra de Corea, para volver a hablar de la muerte de Bin Laden. Ha felicitado a los que han participado en el operativo que ha permitido acabar con él, y ha apelado al espíritu patriota de todos los norteamericanos en "un mundo más seguro.

"Este es un buen día para América, nuestro país ha mantenido su compromiso en que la justicia se haga y que el mundo sea un lugar más seguro, y ahora es un sitio mejor debido a la muerte de Osama Bin Laden", ha apuntado.

Desde muchos puntos se advierte de que la muerte de Bin Laden no tiene por qué suponer el final de Al-Qaeda. La red terrorista se enfrenta ahora a la ausencia de su ideólogo y líder y además a un contexto en el que no tiene ningún papel: el de las revoluciones prodemocráticas en el mundo árabe.

El Ibex 35 ha cerrado con un ligero retroceso del 0,01%, en una jornada marcada por la operación que ha terminado con la muerte de Bin Laden. Ganancias, aunque leves, en el resto de mercados europeos, como el alemán, Dax30 que ha cerrado con aumento del 0,18%, mientras que el selectivo francés Cac40, ha subido el 0,05% y la Bolsa de Londres ha permanecido cerrada por ser un día festivo. El precio del petróleo se desinfló tras conocerse la noticia, pero después se ha recuperado y se sitúa en 126 dólares.

"Puedo informar a los americanos y al mundo que EE.UU. ha llevado a cabo una operación que ha matado a Osama Bin Laden, el líder de Al Qaeda". Así anunciaba el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, la muerte del terrorista más buscado del mundo. A punto de cumplirse 10 años del 11-S, Osama Bin Laden ha muerto en Pakistán abatido por los disparos de un comando de las fuerzas especiales estadounidenses. En el asalto a su fortaleza, una casa situada en una barrio de mansiones de lujo en la ciudad paquistaní de Abottabad, han muerto también tres de sus colaboradores y uno de sus hijos. Quedan aún muchas incógnitas por resolver de forma oficial. Una es qué se ha hecho con el cadáver. Según los medios estadounidenses ha sido sepultado en el mar después de que se le realizaran las pruebas de ADN y pocas horas después de su muerte.

Yemen, de donde es originaria la familia de Bin Laden, ha dado la bienvenida a la noticia de su muerte. Sumido en una revuelta popular contra su presidente, el país ha sido uno de los principales aliados de los Estados Unidos en el mundo árabe, pero también feudo de Al Qaeda y granero de islamistas radicales.

En su montañosa geografía, este país alberga a una de las franquicias más activas de la organización terrorista: Al Qaeda en la Península Arábiga, una rama que también atenta contra los intereses turísticos de Yemen. Por eso, la muerte de Bin Laden deja indiferentes a pocos yemeníes. Muchos expresan este lunes su alegría, pero otros ven en él un símbolo de lucha contra la supremacía estadounidense.

Y hay quien piensa que se ha elegido el momento, justo en medio de las revueltas árabes.

Era el hombre más buscado del mundo... vivo o muerto. Osama Bin Laden, líder de Al Qaeda cuya muerte ha anunciado este lunes Barack Obama, nació el 10 de marzo de 1957 en Yeda (Arabia Saudí), en el seno de una familia multimillonaria. Es el decimoséptimo de los 52 hijos de Muamar Bin Laden, campesino saudí de origen yemení que se convirtió en magnate de la construcción. Estudió Religión y Ciencias Económicas y se graduó en la Universidad Rey Abdul Aziz.

Osama Bin laden, nacido en Arabia Saudí en 1957 en una familia rica, luchó en 1979 en el bando patrocinado por Washington contra la ocupación soviética de Afganistán. Hasta que en 1988 funda Al Qaeda y cambia de objetivo. "Hay que hacer la guerra santa y expulsar a los americanos de tierra musulmana", dice en la única entrevista concedida a un medio occidental.

Desde muchos puntos se advierte de que la muerte de Bin Laden no tiene por qué suponer el final de Al-Qaeda. La red terrorista se enfrenta ahora a la ausencia de su ideólogo y líder, y además a un contexto en el que no tiene un papel protagonista, el de las revoluciones pro-democráticas en el mundo árabe.

Osama bin Laden fue abatido en una casa de Abbottabad, un enclave vacional en las afueras de Islamabad, capital de Pakistán, que curiosamente se encuentra junto a una base del ejército y a una academia militar paquistaní. Por eso, según CNN, la mayoría de la población en este enclave no demasiado populoso pertenece a las fuerzas armadas de Pakistán.

  • Los atentados del 11-S supusieron el nacimiento de la llamada ‘Guerra contra el terror’
  • El recorte de libertades por seguridad y la cárcel de Guantánamo fueron sus efectos
  • Las revueltas árabes han desmontado la retórica de Al Qaeda en Oriente Medio
  • La posible respuesta de la red terrorista y la situación en Afganistán, principales incógnitas

El vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha calificado este lunes de la "operación antiterrorista de la máxima importancia" la muerte de Osama Bin Laden, hasta ahora líder de Al Qaeda, pero ha subrayado que "este no es el final de la organización" porque "el peligro continúa". Por ese motivo, ha dicho el ministro del Interior, España no va a bajar la guardia, pero tampoco va a incrementar el nivel de alerta. "Tenemos un nivel prevención antiterrorista alto-alto, suficiente para garantizar la seguridad de los españoles", ha afirmado.

  • Los investigadores valoran en un millón de euros el valor de la residencia
  • Convivían tres familias en ella, sin internet, teléfono ni televisión
  • Apenas contaba con ventanas al exterior, a pesar de su gran tamaño