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María Rey: "Ninguna manifestación existe si no se cuenta"

La periodista ha sido nombrada Presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid

No confundir lo importante con lo urgente, clave para mantener el periodismo a flote

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María Rey visita 'Gente Despierta'
María Rey visita 'Gente Despierta'

La periodista María Rey ha sido nombrada como nueva presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid,  la tercera mujer en el cargo y ha visitado Gente Despierta para hablar de su trayectoria en los medios.

Gente despierta - María Rey, nueva presidenta de la APM - Escuchar ahora

Después de Carmen del Riego y Victoria Prego, María Rey es la tercera mujer en acceder a la presidencia de esta organización, que tiene ya más de un siglo y cuarto de historia.

Se fundó en 1895, durante el reinado de Alfonso XIII, cuando los periódicos eran un referente informativo y todavía no había llegado a las casas ni la radio ni la televisión.

Optar a este cargo, para la periodista es “una responsabilidad, porque tiene mucho peso en esta profesión y hay que estar a la altura”.

Los objetivos de su mandato

Uno de los objetivos fundacionales que recuerda la periodista es el de la asistencia social. Hace 125 años los periodistas pasaban necesidades y no estaban cubiertos, no tenían buenos contratos, no tenían asistencia social de ningún tipo y la APM se encargaba de darles esa asistencia y cobertura médica.

“Y ahora estamos en un momento justo, ayer estaba elaborando el informe de análisis del estado de la profesión que hacemos todos los años y me doy cuenta que el primer punto vuelve a ser la asistencia social, porque la prioridad es la precariedad laboral desde el punto de vista de los salarios, que han ido bajando, perdiendo valor con el tiempo.

También los equipos han ido perdiendo peso, hay muchas menos personas haciendo las tareas que se hacían antes y también de la libertad,  porque todos los periodistas consultados concluyen que tenemos menos libertad para trabajar que antes por las presiones de la propia empresa y por las presiones de los poderes”, cuenta María.

Además, incide en la importancia de no perder más confianza de los ciudadanos. “Estamos viviendo un momento tremendo, porque la población está muy sectorizada y se asocia mucho periodismo y política y pierden calidad una cosa y la otra casi al mismo tiempo. Son como el reverso y el anverso de la misma moneda. Tenemos que mantener la confianza porque el oficio, la profesión, el ejercicio de la libertad de expresión es un pilar fundamental de la democracia”, subraya.

La trascendencia de contar lo que está pasando

La Asociación de la Prensa de Madrid ha condenado en varias ocasiones durante el último mes los ataques a periodistas que se han producido en las manifestaciones de Ferraz. Esos días se hizo muy habitual ver a periodistas, reporteros gráficos con casco, con chalecos identificativos. Ante estos hechos, María Rey defiende continuar con el trabajo periodístico para informar y contar lo que sucede. “Tenemos que combatir esa intransigencia con información y con serenidad. Hacer el trabajo como podamos, siguiendo las recomendaciones siempre que se pueda del propio Ministerio de Interior.  Se hace con mucha dificultad, pero hay que hacerlo. Hay que estar y además demuestra la falta de inteligencia de los que agreden y acosan a los periodistas, porque ninguna manifestación, ningún acto público, existe si no se cuenta. Así que si se hubiera limitado a ir a gritar a cualquier rincón, me da igual la sede de qué partido, y nadie estuviera allí para contarlo, no hubiera tenido ninguna trascendencia y no hubiera aparecido nadie al día siguiente. Si están es porque lo estamos contando”, sentencia.

Confundir lo importante con lo urgente, gran error

Sobre la competición constante por la repercusión en los medios de comunicación, sobre todo en las televisiones del rótulo de última hora, la periodista considera que se confunde lo importante con lo urgente.

“La última hora es algo que está pasando ahora, algo inesperado, no algo que estaba en la hoja de previsiones por la mañana y tarde. La tengo yo a diario y esa discusión la tengo con mi equipo también. Creo que es una cosa generacional, a las generaciones más jóvenes, que son más multipantalla, les chirría menos. Y a los que llevamos un tiempo y somos más exigentes con el lenguaje y con el contenido de los rótulos en los titulares, nos chirría más. Pero sí, yo creo que se abusa y además hay una tendencia generalizada y seguro que yo caigo en ella también a tratar al espectador como si fuera tonto. Y ese es el momento en el que has perdido el sentido de tu trabajo”, subraya María Rey.