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El drama de Frida Kahlo, del accidente que cambió su vida a su sospechosa muerte

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Frida Kahlo: el accidente que cambió su vida
Frida Kahlo en 1939

Quería ser doctora, pero un grave accidente frustró sus sueños. Frida Kahlo solo tenía 18 años cuando el autobús en el que viajaba fue arrollado por un tranvía, dejándola al borde de la muerte. Sobrevivió, pero su vida dio un giro de 180 grados: atrás dejó sus deseos por convertirse en médica y en su lugar despertó en ella la pasión por el arte. Sin embargo, no estaba segura de que pudiese ser su carrera, por lo que un día se acercó a Diego Rivera mientras este realizaba un mural y le pidió que observara sus cuadros y le dijera si era buena pintora. Él le animó a seguir aquel camino. Al tiempo se casaron, en 1929: ella tenía 22 años, él 42. El documental Frida, ya disponible en RTVE Play, nos acerca a la vida de Frida Kahlo, marcada por aquella tragedia que la acabó convirtiendo en artista.

El espantoso accidente que sufrió Frida Kahlo

Frida Kahlo ya había estado enferma en la infancia: contrajo polio a los seis años. Su salud, sin embargo, empeoró gravemente en 1925. Aquel año, el 16 de septiembre de 1925, un accidente trastocó todos los planes de la joven, que soñaba con ser doctora. Frida, de solo 18 años, volvía a casa en autobús desde una feria junto a Alejandro Gómez Arias, su primer amor. Un tranvía arrolló el autobús en el que viajaban, atropellando a muchas personas. Ella sobrevivió, pero quedó gravemente herida, tanto que los médicos pensaban que moriría en el quirófano. Frida, a quien un fragmento de metal le atravesó el cuerpo desde la cadera izquierda hasta salir por la vagina, sufrió diversas facturas, entre ellas en dos vértebras lumbares.

Durante su hospitalización se refugió en el arte. Su madre mandó hacer un atril adaptado para que pudiera utilizarlo desde la cama y Frida se entretuvo pintando, retratando al principio a sus amigas. Notaba la ausencia de su novio: Alejandro Gómez Arias fue alejándose cada vez más de ella hasta dejar de formar parte de su vida. Así floreció su pasión por la pintura. Su obra estaría desde entonces influida en parte al sufrimiento, como en El deseo perdido (Hospital Henry Ford), en el que plasmó el dolor de un aborto espontáneo, o Unos cuantos piquetitos, con la rabia por la infidelidad de su marido con su hermana pequeña.

¿Tuvo algo que ver Diego Rivera en su muerte?

Su matrimonio con el también pintor Diego Rivera estuvo lleno de altibajos. Además de su infidelidad con Cristina Kahlo, y entre otras amantes, también tuvo una relación con Paulette Goddard, exmujer de Charlie Chaplin. Hay quien cree que Diego Rivera rompió con Frida Kahlo por su aventura con la actriz, aunque otros dicen que fue para mantenerla a salvo. Lo cierto es que Diego Rivera y Frida Kahlo se divorciaron y, tras la separación, Frida decidió que no quería nada de Diego Rivera. A partir de entonces se mantendría a sí misma con sus propios cuadros, o al menos esa era su intención: vendió un autorretrato, pero en realidad lo había comprado su exmarido, como descubrió más tarde.

La salud de Frida Kahlo no hizo sino empeorar. Preocupado, Diego Rivera insistió en que fuese a verle a San Francisco. Allí se reconciliaron y volvieron a casarse. Llegó un punto, en 1944, en el que los dolores de la artista eran constantes, insoportables. "Sigo deseando matarme. Diego es quien lo evita, porque tengo la vana idea de que me extrañaría", aseguró ella. En 1953, un año antes de su muerte, le amputaron la pierna. "Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas para volar?", reflexionaba ella.

Comenzó a abusar de las drogas y el alcohol, como cuentan en el documental Frida. "Comienza a dejarse ir. Para ella el futuro es pavoroso y decidió no llegar a ese futuro", explica el nieto del pintor mexicano, Juan Rafael Coronel Rivera, que participa en la producción. Aunque en el acta de defunción figura como causa de la muerte una embolia pulmonar, los testimonios del documental apuntan en otra dirección. "Diego Rivera sabía muy bien que para Frida vivir así era algo casi imposible. No quería que ella sufriera tanto y no sabemos si Frida tomó aquellas pastillas ella sola", cuenta la biógrafa Hayden Herrera. El propio nieto de Diego Rivera comparte en el documental las sospechas que existen sobre la posible participación de Diego Rivera en la muerte de Frida Kahlo: "Según algunas versiones, Diego la ayudó, pero eso es un tabú en la familia. Nadie habla de ello. Quizás fuera él, pero a mí no me parece que fuera algo malo, ¿no? Si la compañera de tu vida, de toda tu vida, te dice 'estoy cansada, quiero irme ya, ayúdame', quizá trates de ayudarla".