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Cinco papeles por los que siempre recordaremos a Robin Williams

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El actor Robin Williams muestra su Oscar por su papel secundario en la película 'El indomable Will Hunting'.
El actor Robin Williams muestra su Oscar por su papel secundario en la película 'El indomable Will Hunting'.

El lunes amanecía con una triste noticia para el cine en España: "Las cifras de recaudación en cines del fin de semana marcan un suelo histórico. Una vez más.".

El lunes, ya a altas horas de la madrugada, moría con la noticia del fallecimiento a los 63 años de Robin Williams.

Cuesta no relacionar ambas ideas. La sensación de que Robin Williams, que apenas una hora y pico después de su muerte ya había generado más de tres millones y medio de tuits en todo el mundo, es uno de los últimos iconos, poderosos iconos, de un mundo que muere, el de las estrellas de cine que marcaron a varias generaciones en las pantallas de cine y en las de televisión a través de las cintas VHS. Su trayectoria es la trayectoria emocional de esas generaciones, y con lágrimas en los ojos la repasamos en cinco grandes hitos.

El club de los poetas muertos(1989)

Los términos que parecene definir con más particularidad a Williams son cómico, comedia, humor. Y, sin embargo, los papeles que le lanzaron a la fama tienen en común su carácter de mentor, de maestro inspirador. Uno de los personajes que marcó una época y que representará con más fidelidad el trabajo actoral de Williams será el de John Keating, aquel profesor de literatura políticamente incorrecto que despertaba en los alumnos de un colegio interno la pasión por la vida y las humanidades.

"Carpe diem, haced de vuestras vidas algo extraordinario" y aquellos versos de Whitman, "Oh, capitán, mi capitán" (Ethan Hawke ya estaba allí. Y Joshua Charles, el Will Gardner de The Good Wife) serán gritos de guerra para al menos un par de generaciones.

Dos años antes, en Good Morning, Vietnam, Williams había interpretado un papel semejante. Ambos trabajos, y el que interpretó en El rey pescador en 1991, le valieron sus respectivas nominaciones al Oscar.

Despertares (1990)

Antes de encadenar sus grandes éxitos del cine infantil y juvenil, con los que construyó su figura de humorista, Robin Williams interpretó al doctor Malcolm Sayer en Despertares, coprotagonizada con Robert de Niro. Volvía a interpretar la figura de un visionario incomprendido por el establishment, en este caso médico, que trataba de cambiar la forma de ayudar a sus pacientes. Una película quizá no tan recordada pero llena de emociones, en la que Williams muestra la variedad de sus registros.

Hook (1991)

Robin Williams encarnó en Hook una original versión de Peter Pan, la que creó el rey Midas Steven Spielberg. Pan, y especialmente el que construyó Hook, es la figura de ficción que quizá representa mejor que ninguna otra las generaciones que crecieron con los personajes de Robin Williams. Un personaje de fantasía que había pasado por el aro de la vida convencional, pegado a su teléfono móvil (¡era 1991!), incapaz de asistir al partido de béisbol de su hijo por motivos laborales (ese tópico del cine yanqui), olvidado de lo que él había sido, y que de repente se enfrentaba a su pasado, a su verdadera identidad.

Quizá esto es lo que nos ocurre también a quienes nos enfrentamos de repente con la muerte de ese Niño de Nunca Jamás que también nosotros fuimos.

Señora Doubtfire (1993)

Con Toys, una hermosa película infantil de carácter lírico, y poniendo su voz al genio de Aladdin, Williams viró su carrera actoral en el cine hacia terrenos más cómicos (que por cierto era donde su trayectoria interpretativa habia comenzado) y juveniles.

El travestido papel que interpretó en Señora Doubtfire, papá de por vida, un éxito del cine doméstico (ay, ese entrañable concepto casi difunto), consagró su reconversión actoral en el que posiblemente sea su personaje más reconocible.

El indomable Will Hunting (1997)

Jumanji (1995), Nueve meses (1995) o Jack (1996) fueron éxitos de mayor o menor envergadura que establecieron la figura de Robin Williams como uno de los actores más importantes del cine familiar de los 90. Pero su papel en El indomable Will Hunting, con el que regresó a su figura de mentor, con un papel de corte dramático, le valió el Oscar.

La película quedará en los anales porque su guion, también galardonado con el Oscar, fue firmado por los entonces desconocidos Matt Damon y Ben Affleck, que interpretaron dos de los papeles principales.