Domingos a las 09:00 horas
Debía de haber una mancha de aceite
y el coche culea.
Bajas la cabeza, vuelves a levantarla
y ves una pared de piedra delante de ti.
-Supongamos que la madre va con el cinturón abrochado,
¿esta señora puede llevar a un niño en brazos? ¿Puede o no?
-Rotundamente, no. Porque el cinturón de seguridad
está construido para una sola persona.
Si el niño lo utiliza individualmente,
va inadaptado. Los niños deben ir siempre detrás
y delante las personas que vayan con su cinturón abrochado.
Y al salir de su domicilio, si van a viajar por carretera,
ya se deben de instalar el cinturón de seguridad
que tan útil es en ciudad como en carretera.
El 50% de los accidentes se producen a velocidades
inferiores a 50 km/h.
El cinturón de seguridad
es quizá el avance tecnológico en la automoción
que más vidas ha salvado en el mundo.
El uso del cinturón de seguridad no es por agradar
a las autoridades de tráfico,
es que está en juego nuestra seguridad.
Es por autoprotección.
No debemos pensar que nos van a poner una multa,
debemos pensar en que nos puede salvar la vida
o por lo menos reducir las consecuencias letales
de un accidente.
Hace más de 50 años que el ingeniero Nils Bohlin
inventó el cinturón de seguridad
y para demostrar la eficacia de su descubrimiento,
usó dos huevos como estos.
Hemos querido realizar un experimento similar
para que comprueben que en caso de accidente, el cinturón
puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte.
Por la falta de utilización del cinturón de seguridad
en caso de un accidente o por un uso indebido del cinturón,
las compañías aseguradoras pueden reducir
la indemnización a la que tienen derecho las víctimas de accidentes,
porque si hubieran llevado abrochado el cinturón,
posiblemente las secuelas que tendría ese accidente
no serían tan graves.
Por tanto, recordar que el cinturón hay que llevarlo bien abrochado,
correctamente ajustado y, además, el conductor es conveniente
que vele porque todos los ocupantes que van en su vehículo
lleven correctamente abrochado los cinturones de seguridad.
Soy Sofía Aguarón, tengo 20 años.
Hace seis años que tuve un accidente de motocicleta
y este accidente me provocó una lesión medular,
una lesión en el brazo derecho
y un encharcamiento de pulmones
el cual me dificulta la vida para respirar bien.
Era el cumpleaños de mi abuelo,
mi madre me dio permiso para salir a felicitarlo,
entonces llamé a mi pareja y dije: "Esta es la mía, me voy".
Llamé, vinimos con la moto y nos fuimos por una carretera
al pueblo de mi pareja.
En ese momento, en una de las curvas que hay en esa carretera,
yo iba de paquete y se nos fue la moto
por la gravilla que había y yo salí disparada.
En el momento de caer en el suelo
había un tubo que tapaba un acequia
y estaba roto. Entonces eso fue lo que me seccionó la médula
y me rompió la vértebra,
que fue donde se me salió el líquido de la médula, etc.
Mi tío trabaja para Protección Civil.
En ese momento, él me encuentra allí,
yo le digo que no puedo levantarme ni siento las piernas.
Él controla muchísimo mi respiración,
me meten para el helicóptero
y en ese momento pierdo la conciencia.
Estuve dos semanas en la UCI,
luego ya me pasaron a planta.
A mí el médico me dice que me traen la silla manual,
pero que no sabe si voy a poder andar con esa silla
por mi brazo derecho.
Entonces yo dije: "Tráemela que yo me lo propongo,
yo tengo que salir de aquí, yo no me puedo quedar en una cama
con 13 años".
Entonces me trajeron la silla, fue uno de los días más felices
de mi vida, porque de estar 24 horas pensando
y dándole vueltas al tema,
ya puedes salir por el hospital,
puedes ver otro mundo que no sea una habitación.
Yo ahora soy independiente, doy charlas, que me reconforta...
Sobre todo, ayudar a personas jóvenes,
porque claro, están en el momento de "a mí no me puede pasar",
"yo soy inmune a todo". Yo digo que esto no es una escayola
que la tienes una semana o dos semanas
y luego te la quitas y vuelves a tu vida normal;
es que esto te pasa, no sabes si volverás a andar,
tienes que volver a aprender a hacer una vida nueva.
Antes de coger la moto, haz un curso de conducción
para que en situaciones límites sepas cómo reaccionar.
Tú lo puedes evitar.
Había guardias urbanos en cada ciudad,
en cada rotonda, sobre todo en las rotondas,
hay siempre había uno.
-En la plaza principal sí, porque había varias salidas
y había un guardia.
-Tenían como unos pedestales.
-Recuerdo que tenía uniforme blanco con un casco blanco
y eran los que dirigían el tráfico.
-Con el gorrito blanco.
-Esos te podían poner multa, si te pasabas,
te mandaba a parar y no parabas,
te podía multar.
-Los guardias ayudaban mucho a que fuera más fluido, mucho más.
-Levantaban la mano para que parara uno,
para que pudieran pasar los que estaban al contrario.
-Poner el orden, pasar los de la derecha a la derecha,
los de la izquierda a la izquierda y así sucesivamente.
-Recuerdo que en navidad era la costumbre
de que a los policías que estaban en el centro,
y que estaba subidos como en altar, ahí,
dirigiendo el tráfico, les dejaran regalos
como en agradecimiento a su sacrificio todo el año,
lloviera, calentara el sol, hiciera frío o calor, ¿no?
Es un método para que uno se ande con ojo,
sobre todo alguien que se lo puede permitir,
que se ande con ojo porque te pueden quitar el carné.
-Me parece muy bien, pero a muchos tenían que quitarles no una y dos.
-Estupendo, ninguna queja.
-El carné les tenían que quitar.
-A la gente que no comente infracciones, pues se le premia.
-Si conduces bien, no te tienen por qué quitar puntos.
-Puede beneficiar eso de que se tomen en serio el código.
-Ir a más velocidad.
-Creo que el exceso de velocidad con los radares y quizá el móvil.
-Esas dos iba a decir, hablar o tocar el móvil
y lo de la velocidad.
-Me imagino que tema de velocidad -El exceso de velocidad.
-Supongo que o ir muy rápido o beber.
-De todas maneras, el programa por puntos lleva varios años
y sigue habiendo accidentes y muertos, así que no sé.
Yo creo que eso es la conciencia de la gente.
-Lo de cero muertos creo que es complicado.
-Bueno, ojalá, la verdad, ojalá,
pero siempre habrá accidentes.
-Cero no, pero se puede reducir.
-Supongo que sí. Un poco difícil cero muertes, pero supongo que sí.
Nos has pillado en la cocina, que si no...
¿Cómo estás?
Se cumplen 20 años este mes de agosto.
Es curioso, porque segundos antes estaba riéndome,
escuchando música en la radio... Bajas la cabeza,
vuelves a levantarla y ves una pared de piedra delante.
Debía de haber una mancha de aceite
y el coche culea.
Culea y, bueno,
es difícil de dominar un coche con tracción trasera;
después me hice una experta.
Sí, recuerdo el momento pared,
recuerdo girarme a mi izquierda, ver a la persona que conducía
sin conocimiento.
Buscas el teléfono; nunca funciona el teléfono
en un accidente de tráfico, y luego la generosidad
de la gente, de los dueños de la casa: "Entra aquí, llama"...
La generosidad de la gente.
¿En qué me ha cambiado? Fundamentalmente en esto.
Es que yo no conducía.
Y bueno, dije: "No, ¿qué es esto?".
"Yo tengo que conducir y además tengo que conducir sola",
porque eso es otro reto. Cuando has tenido un accidente,
te sientes cómoda si vas con alguien.
Y no vale ni "es que vengo a hacer una gestión chiquitita", no.
Esto es una ciudad muy complicada, con un tráfico muy denso y no...
Y eso me pone muy nerviosa.
Y me pone nerviosa quien no respeta el límite de velocidad.
No lo entiendo, no lo puedo entender.
Voy conduciendo en un túnel con una velocidad de 50
y te pasa uno a 90 y dices: "¿Pero estamos locos?".
Pues creo... Os voy a contar, creo que ya sí.
Buscaba la casa de mi hermana, que se había cambiado de casa,
cogí el teléfono para llamarla,
iba tan despacito,
pero pasaba despacito delante de un cuartel de la Guardia Civil.
Bueno, creo que hemos llegado.
¿Cuanto falta, papá? -Mamá, ¿cuánto falta?
Bien. -Bien.
-Se paran cuando está en rojo, se paran cuando está en naranja
y hacen caso a las señales.
-Un ocho, yo creo. -Un siete.
-Mi madre a veces acelera más de 120 km/h y yo le digo:
"Reduce la velocidad, que esta carretera es de 120 km/h".
-Sí, a veces.
-Pues me dice: "Anda, es verdad", y reduce la velocidad.
-Cuando hay tráfico y llegamos tarde al cole
sí que se ponen nerviosos.
-Pues han subido la velocidad demasiado.
La última vez que fue esto 140 por hora.
-Pues es tranquilo.
-Decidles que corran un poco menos.
-Y también mi hermano lo hace.
-Van a lo que van.
Si pone 20 por hora pues van a 20 por hora.
-Nos pueden multar. -Chocar, multar y hacernos daño
en alguna parte del cuerpo.
Nos encontramos en Lisboa, celebrando el "Best of Belron"
en el que están participando 27 países de todo el mundo.
Cada técnico tiene que demostrar sus habilidades técnicas.
Porque al final, el parabrisas forma parte de la estructura,
pero además, el airbag del acompañante se apoya en él.
Si en un parabrisas sustituido no se han seguido el procedimiento
que marca, puede suponer un riesgo para la persona que conduce
y para las personas que van dentro del vehículo.
-El cristal juego un papel importante en nuestra seguridad
y es el motivo por el que nos tomamos nuestro trabajo en serio,
porque sabemos que cada vez que sustituimos una luna
podíamos estas salvando la vida a alguien
y por eso también celebramos este tipo de concursos.
-Más que nada este evento hace que la gente se de cuenta
como ven por qué tanto insistir en repararlos,
el de cambio cuando no se puede reparar,
parece una tontería, pero tenerlo rajado o no,
en caso de vuelco puede suponer la vida de la muerte.
En esta competición haremos cuatro pruebas.
La primera es la reparación de un impacto.
La segunda es una sustitución de un cristal trasero.
La luneta trasera.
La tercera es un cristal descendente.
Vamos a cambiar el cristal del conductor.
La cuarta es la sustitución completa del parabrisas.
Este año hemos introducido un trabajo que tiene que ver
con el parabrisas y es que el coche tiene una cámara instalada.
Estos sistemas apoyan al conductor en tareas de conducción normal,
un cambio de carril, un frenado automático.
-Un sistema con cámaras y sensores
y en la mayoría de los casos la cámara está en el parabrisas
y después de sustituir el parabrisas
también tienen que recalibrar la cámara
para que podamos garantizar la seguridad de estos coches.
Vamos a ver que tráfico recomienda 70 m
y la gente lo que suele dejar es entre 4 o 8 m.
Lo vamos a hacer en paralelo para la seguridad de todos
y que no ocurra nada.
Desde el latigazo cervical, lo más común.
Hasta la muerte por no llevar ajustado el reposacabezas.
Pues ya no te quiero decir nada con el tema de las maletas
que llevamos atrás, objetos sueltos
o una persona que no se ha puesto el cinturón.
Efectivamente.
de que la gente se conciencie.
Me lo tomé con calma. Di el doble de clases prácticas,
pero una vez que me presenté al teórico, lo aprobé a la primera
y nada, pedí que me examinaran ya para el práctico y me lo saqué.
Tengo que reconocer que algunas multas sí que he tenido,
sobre todo, eso de las zonas de residente,
que no me aclaro yo muy bien.
No, porque la única vez que se me estropeó el coche
con una amiga, de repente paró un chico guapísimo
y nos cambió la rueda.
Debajo de una alfombrilla que hay en el maletero
junto con la rueda.
Un término medio. Ahora por ejemplo en la ficción,
mi personaje en "Mar de plástico" es una auténtica Hulk,
pero en carretera la verdad que intento ser bastante pacífica.
Un ocho y medio. No sé si soy muy positiva.
A mi compañero Federico Aguado, de la serie,
que es bastante buen compañero y me gusta su selección musical,
o sea, que sería buen copiloto y siempre sería agradable el viaje.
Teresa Viejo, presentadora de Dime qué fue de ti en TVE y La observadora en RNE, nos habla del accidente que sufrió hace 20 años; conocemos por qué no ponerse el cinturón agrava las consecuencias de un accidente de tráfico; explicamos por qué es tan importante mantener la distancia de seguridad adecuada y, además, repasamos esas infracciones que cometemos sin darnos cuenta.