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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha asegurado este lunes que si hubiese podido presentarse a las pasadas elecciones de noviembre habría logrado el apoyo suficiente para derrotar al republicano Donald Trump. Sin embargo, el presidente electo no ha dejado pasar las declaraciones del actual mandatario y ha contestado que la victoria del demócrata no se hubiese producido de "ninguna manera".

Israel ha emprendido una ofensiva diplomática tras la resolución del consejo de seguridad de la ONU que condena los asentamientos en territorios ocupados. El primer ministro, Benjamín Netanyahu, no acepta los términos de esa votación y acusa de estar detrás a la administración de Obama. Por primera vez, Estados Unidos se abstuvo y la resolución salió adelante. El Gobierno israelí llamó este domingo, día de Navidad, a los embajadores de diez de los 14 países que votaron a favor de la resolución de la ONU, entre ellos España. Según fuentes diplomáticas españolas, en el encuentro el gobierno israelí expresó su "decepción" porque España votara a favor. La delegación española cree que que la resolución es equilibrada: condena los actos de violencia y también los asentamientos colonos. En ningún momento se anunció represalias contra España, según esas mismas fuentes.

Donald Trump, que en cuatro semanas será investido como presidente, ha publicado este tuit: "Los Estados Unidos deben reforzar y expandir su capacidad nuclear hasta que el mundo entre en razón en materia nuclear". Sin más explicaciones. La publicación ha sembrado dudas sobre si lo que pretende es dar la espalda a décadas de negociaciones para reducir el arsenal nuclear mundial, objetivo que se remonta a los tiempos de Nixon. Putin ha dicho que le sorprende el revuelo porque, según él, Trump ya en campaña había anunciado ese propósito.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha culpado este viernes al régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, y a sus aliados, Rusia e Irán, del "asalto salvaje" que sufre Alepo, donde las fuerzas gubernamentales mantienen bloqueados a miles de civiles en el último reducto de los rebeldes, y ha reclamado el despliegue de observadores imparciales para supervisar la evacuación de los civiles y milicianos que permenecen en el área que controla la oposición.