Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Los combates entre el ejército y los rebeldes se multiplican en Alepo. Las agencias extranjeras presentes afirman que ninguna de las partes tiene el control absoluto de la ciudad. El presidente Bachar al Assad ha vuelto a decir que el enemigo está en el extranjero y utiliza agentes dentro del país para desestabilizar la nación y su economía.

El Secretario General de la ONU ha confirmado el ataque del ejército sirio a los observadores del organismo. Mientras tanto, las fuerzas del régimen han intensificado su asalto a la ciudad de Alepo, lo que ha obligado a 200.000 habitantes a huir. Muchos de ellos se han trasladado a los campos de refugiados de Turquía. Aumenta la preocupación por el arsenal de armas químicas del régimen sirio y la posibilidad de que recurra a ellas. Por su parte, Francia pedirá al Consejo de Seguridad una reunión urgente sobre Siria.

Los rebeldes sirios han capturado hoy un control militar en las afueras de Alepo, la segunda ciudad más poblada de Siria, donde los opositores al régimen libran una sangrienta batalla con el ejército. En dos días, 200 mil civiles han huido ya de Alepo, bombardeada con helicópteros y artillería pesada por las tropas de Al Asad.

El régimen de Bashar al Asad ha amenazado con echar mano de su arsenal químico en caso de intervención extranjera, "pero nunca contra su propia población", ha matizado. Este lunes los combates más duros han tenido lugar en Alepo, la segunda ciudad del país, y en Damasco.

Y en Siria, se intensifican los combates en las ciudades de Damasco y Alepo entre el ejército y los rebeldes. Y crece la preocupación en los países fronterizos por la avalancha de refugiados. El Presidente Assad ha reaparecido en la televisión oficial con el nuevo jefe del Estado Mayor.

El régimen sirio de Bachar El Assad ha sufrido uno de los más duros golpes a su cúpula militar, al símbolo de la represión más sangrienta. El pasado miércoles un atentado suicida, en la sede de la Seguridad Nacional, en el corazón de Damasco, acabó con la vida de 3 altos cargos del régimen. Entre ellos, el ministro de Defensa y el viceministro, cuñado del lider sirio. La guerra civil entre la oposición y los fieles a El Assad ha llegado a la capital y amenaza con convertir la zona en un auténtico polvorín para Oriente Medio. La población buscar refugio huyendo de los combates que, desde que comenzó el conflicto, hace 16 meses, ha costado la vida a más de 20 mil personas. Una situación incontrolable en una región clave para la estabilidad mundial.