Enlaces accesibilidad

Jóvenes y yihad

  • El 63 % de los detenidos por delitos de este tipo tiene entre 20 y 34 años
  • Los expertos avisan de que el papel de ellos y ellas cada vez se aproxima más

Por
Las mañanas de RNE - Jóvenes y yihad

El único sospechoso del atentado fallido en la estación de metro en Times Square era un bangladesí de 27 años. Los miembros de la célula que atentó en agosto en Las Ramblas tenían entre 19 y 28. Y esta misma mañana los medios de comunicación informaban de la detención de un presunto yihadista en la localidad madrileña de Majadahonda. El arrestado, de 19 años, llevaba radicalizándose desde los 16.

Son solo tres ejemplos de cómo los terroristas yihadistas son cada vez más jóvenes. No es una percepción. Los datos lo avalan. Según un estudio del Real Instituto Elcano, el 63 % de los detenidos por delitos de este tipo tiene entre 20 y 34 años.

A menudo, nos preguntamos cómo es posible que jóvenes educados en Europa o en Occidente atenten contra sus propios vecinos. Este lunes Las mañanas de RNE ha hablado de jóvenes y yihad con Miguel Perlado, miembro del Colegio de Psicólogos de Cataluña; Rafael Navarro, capitán de la Guardia Civil y psicólogo; y Rachid El Younoussi, secretario de la Asociación Darna y director del periódico digital InfoTalCual.com.

Además, los expertos avisan de que el papel de ellos y ellas cada vez se aproxima más. Un atentado perpetrado por una mujer puede ocasionar cuatro veces más víctimas y multiplicar por ocho la repercusión mediática. Su capacidad para pasar inadvertidas y la menor vigilancia que hay sobre ellas, unida al impacto que causa el activismo femenino en un universo tan masculino como el del islamismo violento, las ha convertido en armas de las organizaciones terroristas. En España, la primera detención de mujeres asociada a la órbita del yihadismo -dos jóvenes de 14 y 19 años que salían de Melilla rumbo a Siria e Irak- no se produjo hasta agosto de 2014.

El estudio de Elcano también aporta otro elemento común en muchos de ellos: una especie de conversión. Es decir, muchos de estos musulmanes estaban integrados en sus entornos y de forma más o menos súbita descubren su fe religiosa bien de forma individual o bien en grupos pequeños. Este proceso de radicalización puede darse en un tiempo récord. Es lo que los expertos llaman exprés.

Vídeos, redes sociales, pero al final, siempre el contacto directo. ¿Qué papel juega la religión? Dicen los expertos que el Corán debe interpretarse y que es precisamente esa adaptación para nuestros días lo que falla.

Pero, además de la religión, hay otros ingredientes a tener en cuenta. Un estudio francés revelaba en 2010 que para un musulmán es 2,5 veces menos probable que le llamen después de una entrevista de trabajo. Y, además, en los hogares de familias musulmanas se ingresan, de media, 400 euros menos.