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El público se rinde a los clásicos de Underworld en la última noche de Sónar 2011

  • Los británicos derrocharon energía en el escenario SonarClub
  • Chris Cunningham sorprendió con inquietantes proyecciones
  • En Sónar Día destacaron el rapero Yelawolf y los sudafricanos Shangaan Electro

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Sónar 2011 - Resumen de Sónar Día y noche

La última noche del festival Sónar suele dejar con buen sabor de boca. La de este sábado ha continuado la tradición, con el conciertazo de Underworld. El dúo británico, presente en la escena electrónica desde la explosión techno de mediados de los 90, derrocha tanta energía como antes.

En un repleto escenario SonarClub empezaron con todo su arsenal. Supieron captar al público desde el primer momento, con remezclas de sus clásicos, "Cowgirl", "Rez" y "Pearl's Girl". No había en la pista nadie que no saltara, alzara los brazos o bailara frenéticamente.

Aunque hubo algún momento en que el público de Sónar 2011 se tranquilizó, no fue así para el cantante de Underworld, Karl Hyde.

Las pantallas gigantes repartidas por todo el SonarPub nos permitieron ver de cerca sus energéticos movimientos y paseos de un lado a otro del escenario, y hasta planos de su cara (pudimos ver que tuvo momentos de gran teatralidad). Un detalle que nos llamó la atención fue lo bien que se lo estaban pasando Hyde y Rick Smith, a los que se les escapaban carcajadas en algún momento.

Cuando el concierto se relajaba a la mínima Hyde alzaba sus brazos, consiguiendo que la locura volviera. Otro momento de ‘calor' fue cuando tocaron uno de los temazos de su último álbum, Barking. La canción "Scribble" gustaba a los seguidores de Underworld allí presentes, como bien se encargaron de demostrar.

Cuando llevaban una hora y cuarto de actuación se percibía que el final del concierto estaba cercano. "Born Slippy", el que fuera tema principal de la película Trainspotting provocó una auténtica locura. Las agujetas del día posterior así lo corroboran.

Descubriendo a Cunningham

Una de las actuaciones que tenía lugar más temprano fue la del realizador de videoclips Chris Cunningham. Presentó en SonarClub un show de gran formato en el que las proyecciones eran las protagonistas.

El británico tiene el honor de provocar que prácticamente nadie entre el público moviera sus músculos. Y es que sus proyecciones eran tan sorprendentes, inquietantes y cautivadoras al mismo tiempo que bailar hubiera hecho que nos perdiéramos los detalles. Impecablemente sincronizadas con la música que pinchaba volcado sobre sus platos, vimos pequeñas historias surrealistas, algunas violentas, otras oníricas...

Sónar Día Sábado

De las actuaciones que han poblado los espacios del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, RTVE.es se queda con el rapero de Alabama, Yelawolf. El artista, recientemente fichado en el sello de Eminem, Shady Records, ha sido pura energía sobre el escenario.

Ha actuado con su torso al desnudo pero arropado por múltiples tatuajes. Con un hip hop muy potente ha completado una actuación brillante. Él mismo ha confesado a RTVE.es que se transforma sobre el escenario y lo da todo al público. También que el fichaje por Shady Records ha sido un cambio enorme en su vida. En septiembre de este año publica su segundo álbum, Radioactive.

Otra de las actuaciones más destacadas ha sido la de Shangaan Elektro. El grupo de Soweto, Sudáfrica ha traído a Barcelona los ritmos de la etnia tsonga shangaan, reinterpretada con instrumentos electrónicos.

El genio de la formación, Nozinja, se ha entregado desde un primer momento. Completamente emocionado ha espetado al público: "He soñado con España; he soñado con Barcelona y el sueño se ha cumplido, estoy aquí”.

También lo han dado todo los bailarines, vestidos con llamativos monos naranjas y rojos y pelucas de colores y las cantantes, que lucían conjuntos azules y faldas tradicionales que marcaban sus voluptuosos movimientos de cadera.

El frenético conjunto ha conquistado al público durante 45 minutos. Nozinja ha contado a RTVE.es al acabar la actuación que hubiera necesitado dos horas para hacer una actuación aún más inolvidable. Y es que ciertamente, nos ha dejado con ganas de más, ya que el sonido era totalmente nuevo y sorprendente.