Enlaces accesibilidad

Metaverso, la evolución de internet que permitirá entrar en una dimensión hasta ahora desconocida

Por
Imagen de la instalación 'Machine Hallucinations - Space: Metaverse', del artista Refik Anadol.
Imagen de la instalación 'Machine Hallucinations - Space: Metaverse', del artista Refik Anadol.

Mark Zuckerberg daba a conocer la semana pasada Meta, su proyecto para liderar el desarrollo del metaverso. Este concepto, que a muchas personas les puede sonar a ciencia ficción, tiene en realidad casi 30 años a sus espaldas, y encierra un viejo anhelo tecnológico: la recreación de mundos virtuales con los que poder interaccionar. Concebido como un internet llevado a un nivel superior, el metaverso levanta recelo, escepticismo e ilusión a partes iguales. Pero si esta idea finalmente consigue materializarse, supondrá un salto radical para el ser humano que le permitirá adentrarse en una dimensión hasta ahora desconocida.

"Pensaremos en la sociedad antes y después del metaverso, igual que con internet", declara a RTVE.es Rafael Martínez-Cortiña, investigador y miembro del comité científico de la revista Telos, quien define a este universo virtual como "un mundo completamente nuevo para el ser humano", en el que sobresale la capacidad de interacción que ofrece. "En realidad, es una evolución de internet. Ahora solo entramos en internet y accedemos a sus servicios, pero con el metaverso experimentaremos internet, que de esta manera se convertirá en una experiencia", describe.

Óscar (knob2001): El metaverso no será nada de lo que ahora creemos que va a ser.

Óscar (knob2001, director de la comunidad Real o Virtual y uno de los mayores expertos españoles en realidad virtual, coincide en asegurar que el metaverso "va a llevar a la humanidad a un mundo nuevo", aunque deja claro que "no va a ser nunca lo que diga Zuckerberg o lo que diga Facebook". "Al igual que internet, es una red de redes, y será un mundo de mundos, un universo de universos, y se podrá liderar, como hizo IBM en el desarrollo técnico de internet, o como lo hacen ahora las grandes tecnológicas; pero el metaverso será algo más espontáneo, que se tardará mucho más tiempo en alcanzar y que por supuesto no será nada de lo que ahora creemos que va a ser", añade.

A la espera del "salto tecnológico"

El desarrollo del metaverso dependerá en gran medida de la iniciativa de grandes compañías tecnológicas como Facebook -o Meta-, especialmente en sus primeras etapas. Sin embargo, el verdadero impulso llegará con la generalización de sus contenidos, aunque antes debe producirse lo que los expertos denominan "salto tecnológico". Algo para lo que aún tendrán que pasar muchos años, incluso décadas. "El comienzo del metaverso va a ser muy duro, y va a estar controlado por poca gente, igual que lo estuvo internet. La revolución vendrá cuando lleguen las aplicaciones fáciles para que todo el mundo pueda crear sus propios mundos dentro de ese metaverso", asegura Óscar (knob2001).

"El desarrollo del metaverso está a la espera de que se dé el salto tecnológico, que está costando más porque la realidad virtual y aumentada son muy complicadas de desarrollar. Este salto tecnológico vendrá con la miniaturización de los componentes y con su abaratamiento. Cuando se consigan ambos aspectos, llegará el último salto que es el de software, el de interface, el de democratizar las aplicaciones. Pero hasta que no se venda el hardware, no se va a poder crear el software, igual que hasta que no ha habido teléfonos en las manos de todos los usuarios, muchas empresas no han dado el salto de desarrollar aplicaciones para los móviles", prosigue este especialista.

En el metaverso se interactúa con otras personas, objetos y espacios por medio de un avatar, gracias a un ecosistema integrado por dispositivos de realidad virtual y de realidad aumentada, que incluyen elementos como gafas y cascos, mandos, sensores, ropa inteligente, teléfonos, aplicaciones... El primer peldaño de la escalera serían los visores; las gafas de realidad virtual y aumentada. El desarrollo de estos dispositivos está todavía en pañales desde el punto de vista tecnológico, aunque en cuanto a sus limitaciones "ahora mismo, ya no son de resolución o de potencia, sino de factor de forma". "La tecnología existe, lo que no existe es el factor de forma de esa tecnología. Tiene que ser algo que no sea demasiado invasivo; lo suficientemente cómodo y ligero, con una batería lo suficientemente potente para que el uso esporádico se convierta en continuo. En el momento en el que puedas utilizar ese visor de forma continua, dejará de ser un problema y empezará a ofrecer soluciones", afirma al respecto Óscar (knob2001).

Imagen del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, durante la presentación de Meta.

Imagen del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, durante la presentación de Meta. CHRIS DELMAS / AFP

Una vieja obsesión

Aunque el anuncio de Mark Zuckerberg coincide con uno de los peores momentos de su compañía, sumida en una crisis de credibilidad y de imagen que parece no tener fin, la idea del metaverso obedece a una vieja obsesión del fundador de Facebook, a quien ya en 2016 se le vio en el Mobile World Congress de Barcelona pregonando las bondades de la realidad virtual, de la que dijo que tenía "el potencial de cambiar nuestras vidas", al mismo tiempo que pronosticaba que sería "el próximo gran contenido" y la "plataforma más social". Ha pasado más de un lustro desde entonces, y los grandes actores del sector tecnológico aún no han dado el golpe sobre la mesa que inaugure la carrera por la realidad virtual y el metaverso. ¿Será el anuncio de Zuckerberg el espaldarazo definitivo?

"Creo que va a ocurrir porque lleva tiempo abonándose el campo para que ocurra. Lo vemos constantemente en las redes sociales como Instagram o Facebook: todo el mundo desea proyectar una realidad diferente a la que vive, y el metaverso supone pasar de proyectarla a vivirla. Si alguien te permite vivirla, ¿cómo vas a decir que no?", opina Rafael Martínez-Cortiña, economista prospectivista que está especializado en analizar escenarios tecnológicos futuros, y que ha sido destacado recientemente por la revista Forbes como uno de los 40 mejores futuristas de España.

Rafael Martínez-Cortiña: Todo el mundo desea proyectar una realidad diferente a la que vive.

Sin embargo, este investigador advierte del aspecto del metaverso que, a su entender, es más inquietante: su capacidad para "meterse en el territorio psíquico de las personas". "Pienso que es un paso más, porque la tecnología ha ido traspasando líneas rojas, como es la privacidad, la intimidad… Pero es que ahora el metaverso reta a la seguridad en un nivel superior, porque podrán hackearte la mente, y eso a mí me genera distintas preguntas a las que creo que ahora mismo nadie tiene respuesta".

"Traspasar la barrera psíquica es algo totalmente nuevo y no sabemos las consecuencias que va a tener en el ser humano. A día de hoy, es algo sagrado. Tu salud mental es de tu propiedad, no es pública. Pero cuando cruzamos la barrera psíquica, se convierte en información pública, y eso puede tener consecuencias. ¿Regularlo? No sé cómo se pueden regular las emociones, los deseos… Es difícil", continúa reflexionando. "Con el metaverso es el propio usuario quien le cuenta a la tecnología lo que desea, y entiendo que es mucho más fácil la manipulación", recalca.

Aunque Martínez-Cortiña también deja claro que el metaverso no dependerá únicamente de la voluntad de Mark Zuckerberg, a pesar de que en estos compases iniciales haya decidido ser su cara más visible. "Es como si pensásemos que Facebook es internet. Hay una red social que a lo mejor no es todo lo beneficiosa del mundo, pero eso no significa que sea todo internet, sino que es solo una parte. Entonces, habrá una parte del metaverso que no será muy beneficiosa, y otras que serán súper beneficiosas, y permitirán por ejemplo comprender la realidad de una manera mucho más rápida, o multiplicar tu creatividad hasta unos límites increíbles…", sostiene.

Un planteamiento que comparte el experto en realidad virtual Óscar (knob2001), quien afirma que "Facebook ha decidido liderar uno de los metaversos, el que ellos tienen en la cabeza, pero va a ser una suma de muchísimas tecnológicas, de muchísimas tecnologías, y evolucionará como evolucionó internet". "El primer metaverso que salga no va a ser ese metaverso que ha mostrado Zuckerberg, y que quizá todos tenemos en mente, porque ahora mismo no hay capacidad técnica. Con lo cual, habrá que ir pasito a pasito", augura.