Enlaces accesibilidad

El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, deberá devolver el dinero público que gastó en su casa

  • Zuma alegó que el dinero se invirtió en seguridad y el Constitucional lo desacredita
  • El presidente dispone de 45 días para devolver 18 millones de euros

Por
El presidente sudafricano Jacob Zuma
El presidente sudafricano Jacob Zuma

El presidente de SudáfricaJacob Zuma, dispone de 45 días para devolver parte de los 246 millones de rands (unos 18 millones de euros) que gastó en la reforma de su residencia privada, según ha dictaminado este jueves el Tribunal Constitucional de este país.

La cantidad exacta que deberá reembolsar será fijada dentro de un plazo de 60 días por la Tesorería Nacional, cuyo cálculo deberá ser aprobado por el Constitucional, indica la resolución judicial.

Esta decisión reafirma el informe de la Defensora del Pueblo, Thuli Madonsela, quien desacreditó que el dinero se hubiera empleado en mejorar la seguridad de la residencia del presidente.

Vivienda situada en Nkandla, Sudáfrica, en cuya reforma el presidente Jacob Zuma gastó 18 millones de euros

Vivienda situada en Nkandla, Sudáfrica, en cuya reforma el presidente Jacob Zuma gastó 18 millones de euros

Malversación de dinero público

La Presidencia justificó como obras destinadas para la seguridad del mandatario -y por tanto a cargo del contribuyente- la construcción de un establo para vacas, un corral para pollos, una piscina (como "elemento estratégico para apagar fuegos") y un anfiteatro en su residencia de Nkandla.

"El presidente no cumplió, defendió ni respetó la Constitución", afirma el veredicto alcanzado por unanimidad por los 11 jueces de la Corte.

El Tribunal concluye que el Parlamento incumplió su obligación de "controlar" las acciones del presidente y amparó la "conducta ilegal" de Zuma exonerándole, con los votos de la mayoría afín, de cumplir las recomendaciones de la Defensora del Pueblo.

El principal partido de la oposición, la Alianza Democrática (AD), uno de los responsables de esta acción judicial, ha anunciado este jueves que presentará una moción de censura para conseguir la marcha de Zuma.

Este caso es el mayor escándalo de corrupción de la presidencia de Jacob Zuma, que llegó al poder en 2009 después de que la Fiscalía retirara los más de 700 cargos de corrupción que pesaban contra él.

Piscinas para "apagar fuegos"

Esta sentencia también desacredita un informe presentado por el ministro de la Policía, Nkosinathi Nhleko, en agosto de 2015, que consideraba que todas las obras realizadas en el complejo del presidente en la localidad de Nkandla (este del país) fueron llevadas a cabo para garantizar su seguridad.

En su informe, leído ante el Parlamento, el ministro, miembro del oficialista Congreso Nacional Africano (CNA) que lidera Zuma, consideró que la piscina es "un elemento estratégico para apagar fuegos" y por tanto una infraestructura dedicada a la seguridad.

El documento establece asimismo que el anfiteatro es un "punto de reunión en caso de emergencia" y que el centro de visitantes construido en las polémicas obras es necesario para asegurar la confidencialidad de los encuentros del presidente.

Pese a este y otros escándalos de corrupción, Zuma ganó las elecciones de mayo de 2014 con un 62 por ciento de los votos, lo que le permitió conseguir su segundo y último mandato de cinco años, por imperativo constitucional.