Enlaces accesibilidad

Los héroes que redujeron al asaltante del Thalys dicen que su fusil se encasquilló

  • Creen que sus intenciones criminales eran evidentes
  • Explican que el asaltante no parecía saber cómo funcionaban las armas
  • Los jóvenes destacan que les movió el instinto de supervivencia
  • Hollande condecorará a los jóvenes con la Legión de Honor

Por
Los héroes que salvaron cientos de vidas en un tren con destino a París actuaron por instinto

El fusil kalashnikov de Ayoub El Kahzzani, el asaltante del Thalys Amsterdam-París, se encasquilló, pero sus intenciones criminales eran evidentes, han afirmado este domingo Spencer Stone y Alek Skarlatos, los dos militares estadounidenses que redujeron al atacante del tren Thalys el pasado viernes.

En una conferencia de prensa en la embajada estadounidense en París, junto a un amigo que también participó en la acción contra El Kahzzani, el estudiante Anthony Sadler, Stone y Skarlatos han indicado que tuvieron la impresión de que el presunto terrorista no estaba bien formado en el manejo de armas.

A juicio de Skarlatos, si hubiera sido hábil con el kalashnikov "habría podido vaciar los nueve cargadores que llevaba y probablemente no estaríamos aquí"

"no se necesitan nueve cargadores para desvalijar un tren"

Respecto a las declaraciones del atacantes de que su intención no era terrorista, sino robar a los pasajeros del convoy, Stone ha afirmado que "no se necesitan nueve cargadores para desvalijar un tren".

Stone, que iba de pasajero como sus otros dos amigos en el Thalys Amsterdam-París, ha relatado que estaba medio dormido cuando se dio cuenta de que un hombre entraba en el vagón con un kalashnikov.

Entonces fue cuando Skarlatos le dijo "Vamos", y los dos se abalanzaron sobre el presunto terrorista.

Mientras El Kahzanni le daba cortes con un cúter, Stone, quien estuvo hospitalizado hasta ayer a causa de esas heridas, lo agarró por el cuello hasta que cayó inconsciente y Skarlatos le daba golpes en la cabeza.

Movidos por su supervivencia y la del resto de pasajeros

Preguntado sobre qué motivó su reacción, Stone respondió: "Sobrevivir y permitir a mis amigos y a los demás pasajeros del tren sobrevivir".

Skarlatos, quien ha insistido en que el agresor "tenía mucha munición" y "sus intenciones estaban claras", consideró que su formación militar les sirvió cuando lo tenían controlado, por ejemplo para comprobar que no había más cómplices, pero ha asegurado que al principio lo que jugó fue "el instinto".

Stone reconoció que el hecho de que los tres estuvieran juntos también pesó a la hora de actuar: "Tengo mucha confianza en mis amigos. Sin ellos estaría muerto".

Los tres tenían billete para otro vagón del tren, pero estaban en el que se produjeron los hechos porque había wifi.

"en un atentado terrorista hay que hacer algo, no permanecer pasivo"

Para Sadler, la lección de esta experiencia es que "en un atentado terrorista hay que hacer algo, no permanecer pasivo".

Stone ha explicado, además, que empleó sus propias manos para cortar la hemorragia a otro de los pasajeros heridos, un franco-estadounidense al que salvó la vida. "Me di cuenta de que le salía sangre a borbotones del cuello. Iba a usar mi camiseta, pero me di cuenta de que no serviría, así que le metí dos dedos en la herida, encontré la artería y apreté, así que cesó la hemorragia", ha relatado Stone. El militar mantuvo la presión hasta que llegaron los sanitarios.

Stone recibió el sábado el alta hospitalaria, pero luce aún un aparatoso vendaje en su mano y es evidente un corte en su ceja derecha. El militar ha aprovechado para agradecer los cuidados de los sanitarios y médicos que lograron reimplantarle un pulgar que quedó amputado casi por completo por el presunto terrorista, armado con un cúter, una pistola y un fusil AK-47.

Se han convertido en héroes

La embajadora estadounidense en Francia, Jane Hartley, ha dicho que hablar de héroes para referirse a los tres jóvenes "es perfectamente adecuado".

"Quiero dar las gracias a estos jóvenes que han mostrado lo mejor que puede dar Estados Unidos", declaró la jefa de la legación.

Junto a los tres estadounidenses, se enfrentaron a El Kahzzani un francés de 28 años llamado Damien A. (por ahora no ha querido que trascienda su identidad), que se topó con él cuando salía del baño con el fusil, y el británico Chris Norman, que ayudó a controlar al presunto terrorista.

Todos ellos serán homenajeados el lunes en el Palacio del Elíseo en una recepción organizada por el presidente francés, François Hollande, a la que han sido invitados los primeros ministros de Bélgica, Charles Michel, y Holanda, Mark Rutte, así como la embajadora Hartley. El presidente francés ha anunciado también que este lunes condecorará a los tres jóvenes estadounidenses y a los británicos que participaron en la detención del agresor con la Legión de Honor.