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Al menos 50 muertos en la región china de Xinjiang por una serie de explosiones

  • Las víctimas son 40 atacantes, seis civiles y cuatro policías
  • Las bombas estallaron en mercados y estaciones de policía
  • La violencia en esta región se ha multiplicado desde 2009

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Foto compartida en la red social Weibo de un mercado en Luntai.
Foto compartida en la red social Weibo de un mercado en Luntai.

Al menos 50 personas han muerto en un condado de Xinjiang (región noroccidental de China) debido a una serie de explosiones, entre ellas cuarenta atacantes, seis civiles y cuatro policías, según ha informado la agencia oficial Xinhua. Es el mayor atentado en la región en los últimos años.

Pese a que las explosiones ocurrieron el domingo en una tienda, un mercado callejero y dos estaciones de policía del condado de Luntai (al noroeste de Xinjiang), los medios chinos sólo informaron el lunes de dos muertos y no han elevado la cifra hasta este jueves, como ha ocurrido en anteriores ocasiones.

La policía de Xinjiang, donde la violencia y los enfrentamientos entre la etnia minoritaria uigur, que profesa la religión musulmana, y la mayoritaria han se han multiplicado desde 2009, ha calificado lo ocurrido como "un ataque terrorista severo y organizado", según Xinhua.

Xinjiang, foco de choques étnicos

Los uigures denuncian la discriminación y la represión del Gobierno a su cultura. Pekín, por su parte, atribuye cualquier tipo de disturbios a organizaciones islamistas o separatistas uigures, cuyo objetivo es la independencia de Xinjiang bajo el nombre de "Turkestán Oriental".

Xinjiang, fronteriza con Afganistán y Pakistán, está habitada por varias etnias musulmanas ligadas a los pueblos de Asia Central, como los uigures y, según el Gobierno chino, en ella operan grupos terroristas ligados a la organización radical islámica Al Qaeda.

Sin embargo, grupos uigures en el exilio acusan a Pekín de usar el terrorismo como excusa para reprimir la religión y la cultura de este pueblo.

El suceso más violento de 2014 ocurrió en mayo, cuando desconocidos se adentraron a bordo de varios vehículos en un mercado abarrotado de Urumqi, la capital regional, y arrojaron artefactos explosivos. Murieron 39 personas y 90 resultaron heridas.