Al Sisi apuesta por la continuidad en el Gobierno egipcio

• Encarga formar nuevo gabinete a Mehleb, hasta ahora primer ministro interino
• Todavía está pendiente la convocatoria de elecciones legislativas

El primer ministro Ibrahim Mehleb (izquierda) acude junto al gran imán de Al Azhar a la investidura de Al Sisi como presidente de Egipto.

El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, ha encomendado al primer ministro del país, Ibrahim Mehleb, la formación de un nuevo gabinete, minutos después de que este presentase su renuncia, según fuentes de la Presidencia.

Como estaba previsto, el Ejecutivo de Mehleb ha anunciado este lunes su dimisión al nuevo presidente, quien el domingo asumió la jefatura del Estado, aunque de facto lideraba el país desde que hace 11 meses protagonizó el golpe que destituyó al islamista Mohamed Morsi.

Los medios daban por hecho la continuidad de Mehleb, que fue nombrado el pasado febrero, por lo menos hasta la celebración de las elecciones legislativas, cuya fecha está aún por determinar.

En su escrito de renuncia, recogido por Efe, el Gobierno ha asegurado haber hecho "todo lo posible para cumplir las misiones encomendadas en unas circunstancias muy complicadas, ya que las demandas sociales aumentaron de manera alarmante". "Hemos trabajado para tranquilizar (las protestas) y absorber las olas de ira de los obreros y retomar la producción en fábricas y cooperativas", ha explicado el gabinete, que ha impulsado una fuerte represión contra opositores.

Ex alto cargo de Mubarak

En opinión de analistas citados por Efe, uno de los mayores retos a los que se enfrentará Al Sisi como presidente es reactivar una economía sumida en una profunda crisis, y que ha conseguido mantenerse a flote gracias a las generosas aportaciones de los países del Golfo.

Al Sisi fue elegido como mandatario del país en las elecciones presidenciales celebradas a finales de mayo, en las que obtuvo el apoyo de un 97% de los votos, frente al exiguo 3% cosechado por su único rival, el izquierdista Hamdin Sabahi.

Mehleb está considerado un tecnócrata curtido en una de las mayores constructoras de Oriente Medio y en los pasillos del poder del antiguo régimen de Hosni Mubarak (1981-2011) y lleva en el cargo desde febrero.