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Ban pide apoyo "unitario" a la "desalentadora" misión del representante de la ONU en Siria

  • El secretario de la ONU pide respaldo para el nuevo representante, Brahimi
  • Tiene el encargo de "facilitar una solución política, una transición"
  • Brahimi pide respaldo "urgente e indispensable" a su labor 

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El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido este martes a la comunidad internacional que preste su "apoyo unitario y efectivo" al nuevo representante especial para Siria, Lajdar Brahimi,  para que pueda desempeñar su "desalentadora pero no insalvable" misión mediadora en el país árabe.

"Le agradezco que aceptara el encargo. Es una tarea desalentadora pero no insalvable", ha dicho Ban sobre la labor de Brahimi ante la Asamblea General de la ONU, a cuyos miembros ha pedido que le presten su "apoyo unitario y efectivo" para convencer a las partes de que "la solución no llegará por las armas, sino por el diálogo".

En una sesión dedicada a Siria y en la que habla Brahimi por primera vez desde que asumiera su cargo como sucesor de Kofi Annan el pasado sábado, el máximo responsable de la ONU lanzó su enésima llamada a la comunidad internacional para que acerque posturas sobre el conflicto sirio y entregue su respaldo total al nuevo mediador.

"Os pido a todos que entreguéis vuestro apoyo sólido y unificado a la difícil y esencial misión" de Brahimi, ha indicado Ban ante el plenario de la ONU, donde ha asegurado que el encargo del diplomático argelino es el de "facilitar una solución política, una transición" en Siria,  para lo que necesita el respaldo del Consejo de Seguridad.

Brahimi pide respaldo "urgente e indispensable" a su mediación 

El nuevo representante especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, el argelino Lajdar Brahimi, ha pedido a la comunidad internacional que preste su respaldo "urgente e indispensable" a la "difícil misión" que acaba de iniciar como mediador internacional para detener el conflicto en el país árabe.

"El apoyo de la comunidad internacional es indispensable y urgente, y ese apoyo solo será efectivo si todos tiran en la misma dirección", dijo el exministro argelino de 78 años ante la Asamblea General de la ONU en su primera comparecencia pública desde que el sábado asumió su papel como sucesor de Kofi Annan.

Brahimi compareció ante el plenario de la ONU y reconoció que se enfrenta a una "difícil misión" ya que, dijo, la situación en Siria es "grave y empeora constantemente", pero tampoco evitó señalar así la falta de unidad en la comunidad internacional para frenar una crisis que ha segado más de 15.000 vidas humanas desde su inicio.

En su breve intervención, el nuevo mediador presentó un paisaje desalentador en Siria y explicó que sus primeros pasos en el puesto lo llevarán a viajar a El Cairo para reunirse con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, y después a Siria, donde planea encontrarse con autoridades sirias "en los próximos días".

"Camino a la transición política"

Ante la parálisis que tiene sumido el conflicto sirio al máximo órgano internacional de seguridad, Ban ha pedido una vez más a sus miembros que encuentren "terreno común para ayudar al pueblo sirio a lograr un camino hacia una transición política sin exclusiones, pacífica y democrática".

"La primera responsabilidad de detener el conflicto recae sobre las partes, principalmente el Gobierno, pero nosotros también tenemos la responsabilidad colectiva de encontrar maneras de ayudar a los sirios a acabar con la violencia y resolver sus diferencias por medios pacíficos", ha afirmado Ban.

Según el secretario general,  "el pueblo sirio ha esperado ya mucho, y ahora toda la región se ve engullida por los complejos dinamismos del conflicto" debido ante "una cada vez mayor militarización" de un conflicto que ha segado más de 15.000 vidas humanas desde hace más de un año y medio.

"La continua militarización del conflicto es profundamente trágica y altamente peligrosa", ha alertado Ban, quien ha pedido a todos los actores externos al conflicto sirio, "especialmente a los países en la región", a detener el envío de armas "a cualquiera de las partes", ya que éste podría tener "consecuencias imprevistas mientras el conflicto se intensifica y se extiende".

El secretario general también ha lanzado un nuevo llamamiento para recaudar más fondos que se destinen a ayudar a los afectados por el conflicto en el país árabe, ya que el plan de respuesta humanitaria del organismo para Siria y los países vecinos, valorado en 180 millones de dólares, está "solo financiado a medias".