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Una moción de censura pone contra las cuerdas a Naoto Kan

  • Hay posibilidades de que prospere ya que muchos la apoyan
  • La oposición critica su mala gestión de la crisis de Fukushima

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El primer ministro japonés, Naoto Kan, dice que se niega a dimitir, respondiendo así a la moción de censura que ha presentado hoy la oposición.
El primer ministro japonés, Naoto Kan, dice que se niega a dimitir, respondiendo así a la moción de censura que ha presentado hoy la oposición.

Los principales partidos de la oposición en Japón han presentado este miércoles una moción de censura contra el Gobierno de Naoto Kan por su gestión de la crisis de Fukushima.

La moción -que previsiblemente será votada este jueves- ha sido promovida por el Partido Liberal Demócrata (PLD), que gobernó durante 54 años hasta 2009 y que ha criticado la "falta de credibilidad de Kan ante el pueblo japonés".

El PLD podría recibir el apoyo de algunos legisladores del gobernante Partido Democrático que han criticado también a Kan, por lo que no se descarta que la moción prospere. Si eso ocurriera, el primer ministro estaría obligado a dimitir junto con su gabinete o incluso a disolver la Dieta.

Tres partidos apoyan la moción

Además del PLD, han anunciado su apoyo a la moción el partido Nuevo Komeito, el segundo mayor en la oposición, y el minoritario Sunrise Party.

El líder del PLD, Sadakazu Tanigaki, ha asegurado que el primer ministro carece de credibilidad "en un momento en que debía mostrar su liderazgo a la población" y ha insistido en que Japón nunca logrará avanzar en la reconstrucción si Kan permanece al frente del Gobierno.

La moción que podría costar el puesto a Naoto Kan se produce mientras el Gobierno trata de controlar la situación en la maltrecha planta nuclear de Fukushima, seriamente dañada por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo.

Si 80 miembros de su propio partido lo apoyan, prosperará

Pese a las críticas por su gestión, el primer ministro ha ignorado hasta el momento las voces que pedían su dimisión, aunque se vería obligado a dejar su puesto si en la votación de mañana la oposición logra el apoyo de la mayoría de los 480 escaños de la Cámara Baja.

Para ello deberían votar contra Kan al menos 80 miembros de su propio partido, algo que puede ocurrir si a los seguidores de Ozawa (unos 40) se suman los del ex primer ministro Yukio Hatoyama y varios indecisos.