El Senado francés ha dado luz verde al retraso de la jubilación de los 62 a los 64 años, un paso más en la tramitación parlamentaria de la reforma. Ha salido adelante a última hora de la noche por 195 votos a favor y 112 en contra. Tras ser aprobado por la Asamblea Nacional y anoche por el Senado, el proyecto de ley pasará ahora a una comisión mixta con representantes de las dos cámaras, que acordarán una versión común que volverá a ser sometida a votación. Más de 200 manifestaciones en todo el país pidieron el sábado el rechazo de la reforma.
FOTO: El ministro de Hacienda, Gabriel Attal, interviene durante el debate sobre la reforma de las pensiones en el Senado francés. Alain JOCARD / AFP