Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El Consejo de seguridad de Naciones Unidas, debate la situación en Mali a petición de Francia, país que dará cuenta de la intervención militar que inició el viernes contra los rebeldes islamistas del país africano. Mientras los yihadistas han anunciado que golpearán el corazón de Francia.

Manuel Ricardo Torres Soriano, profesor de Ciencia Política en la Universidad Pablo Olavide y experto en terrorismo yihadista.

Entiende la intervención francesa primero porque es un problema que afecta a la seguridad de los países europeos y porque Francia ha desempeñado históricamente un papel de potencia en la zona y quiere seguir garantizando que ese país sea un Estado aliado.

Considera que hay elementos de coincidencia con Afganistán porque es un país escasamente poblado y con gran capacidad de territorio y donde el Estado es muy débil. Es un entorno ideal para este tipo de organizaciones que se mueven con impunidad. "Puede ser un santurario para organizaciones terroristas" utilizándolo como base para sus operaciones.

Afirma que el descontrol que se ha producido en los arsenales del ejército libio tras la caída de Gadafi ha propiciado que gran parte ha podido caer en este tipo de organizaciones.

Argelia está facilitando la intervención francesa pero no ha querido asumir ningún papel de liderazgo en la zona por que "poner bota sobre el terreno es una misión extremadamente arriesgada". La situación en Mali no se va a resolver con ataques aéreos sino que se tendrá que intervenir en tierra, una operación de la que Argelia no quiere saber nada (14/01/13).

(

  • Los rebeldes islamistas se enfrentan con el Gobierno de Bamako en el norte
  • Desde hace un año, el avance de los grupos radicales ha sido imparable
  • Francia ha desplegado sus tropas para dar cobertura a la CEDEAO

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reúne este lunes. Francia informará de su intervención militar mientras sus aviones bombardean a los islamistas del norte. Tropas francesas se encuentran ya en Bamako, procedentes de Costa de Marfil y Chad, para atacar desde la capital malí. Francia asegura que si no hubieran intervenido, en menos de una semana los islamistas habrían llegado a la capital. El ministro francés de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, ha negado que haya comparación entre la situación de Mali y la de Afganistán.

Una de las decisiones que se han tomado ha sido la de reforzar la seguridad dentro de las fronteras francesas. Es una medida de precaución, ha dicho François Hollande. Volvemos a París.

Francia refuerza su plan de alerta antiterroista, ante las dos ofensivas que se han llevado a cabo en Mali, donde ha muerto un piloto francés, y en Somalia, donde ha fracasado la operación para liberar a un rehén. Lo ha anunciado el presidente François Hollande,y ha asegurado que el rehén está muerto

Francia ha desplegado varios centenares de soldados en Mali, un país partido en dos por la ofensiva salafista. Grupos afines a Al Qaeda controlan todo el norte, unos 800.000 kilómetros cuadrados. El jueves ocuparon la estratégica ciudad de Konna, en el centro del país, y esta noche han vuelto a ser expulsados, con el apoyo de la aviación francesa. Que ya ha sufrido la primera baja, un piloto, según confirmaba esta mañana el ministro de Defensa.

Tropas francesas se han desplegado hoy en Mali. Apoyarán la ofensiva lanzada por el gobierno maliense contra los rebeldes yihadistas que controlan el Norte del país. El Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado el despliegue al haber tomado los radicales islámicos una ciudad clave del centro de Mali.

Francia está dispuesta a intervenir en Mali ante el avance de grupos vinculados a Al Qaeda. Naciones Unidas ha pedido el despliegue urgente de una fuerza internacional para frenar a los islamistas radicales que ya controlan el norte del país.

Francia ayudará militarmente al gobierno de Mali pero en estricto acuerdo con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Es la respuesta que el presidente francés François Hollande, ha dado a la petición de asitencia militar solicitada por Mali, la antigua colonia francesa, para hacer frente al avance de los grupos islamistas armados en su territorio. En su discurso del nuevo año ante el cuerpo diplomático y los periodistas acreditados en París, Hollande ha anunciado que Francia está preparada para detener la ofensiva terrorista en Mali. Una agresión, ha dicho, que compromete la propia existencia de este país africano.

El avance de los grupos islamistas radicales que controlan el Norte de Mali enciende las luces de alarma entre la comunidad internacional: El Consejo de Seguridad de la ONU urge una intervención internacional.

En la República Centroafricana, aumentan las expectativas de un acuerdo de paz, tras la oferta de alto el fuego de la coalición rebelde Seleka.

Los islamistas que ocupan el norte de Mali han destruido este domingo varios mausoleos antiguos de la ciudad de Tombuctú, que consideran signos de idolatría contrarios a la ley islámica.

Se trata de un nuevo gesto de desafío de estos grupos, después de que la ONU haya autorizado una intervención militar para restablecer la autoridad del gobierno de Bamako en esa zona del país.

El Consejo de Seguridad de la ONU ha autorizado el envío de una misión militar africana a Mali para ayudar a las autoridades a recuperar el control del norte del país en manos de rebeldes islamistas desde marzo pasado.

La resolución impulsada por Francia autoriza el envío de una fuerza militar conjunta africana (AFISMA) y fue aprobada por unanimidad de los 15 miembros del Consejo este jueves por la noche, en presencia del ministro de Asuntos Exteriores de Mali, Tieman Coulibaly.

La fuerza militar se desplegará por un periodo inicial de un año con el mandato de entrenar al Ejército maliense y apoyar al Gobierno de Bamako para recuperar el control del norte del país controlado por "terroristas, extremistas y grupos armados".

Así consta en la resolución, que autoriza también a la fuerza militar conjunta africana a apoyar al Gobierno en la defensa de la población civil y a crear un ambiente seguro para el envío de ayuda humanitaria y el regreso de los desplazados a sus hogares.

Los 15 países del Consejo de Seguridad urgen al gobierno de transición en Mali a finalizar una hoja de ruta a través de un diálogo político "incluyente" que lleve a la restauración del orden constitucional y a la unidad nacional en el país africano. En concreto, el máximo órgano de decisión de la ONU aboga por la celebración de unas elecciones presidenciales y legislativas que sean "pacíficas, creíbles e incluyentes" para el próximo mes de abril "o tan pronto como sea técnicamente posible".

La resolución también insta a los grupos rebeldes a cortar todos sus vínculos con los grupos terroristas, en especial con Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) y el grupo Monoteísmo y Yihad en África Occidental (MYAO).