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Los dos intentos de mediación más importantes de Estados Unidos para conseguir la paz entre Israel y los países árabes cumplen años: este mes hace cuatro décadas de Camp David y 25 años de los Acuerdos de Oslo.

En 1978, Israel y Egipto firmaban un tratado de paz en una de las residencias del entonces presidente estadounidense, Jimmy Carter, por el que Israel se retiraba de la Península del Sinaí (ocupada desde la Guerra de los Seis Días) a cambio de que Egipto les reconociera como Estado, fue el primer país árabe en hacerlo.

En septiembre de 1993, Israel y Palestina firmaban en Washington el acuerdo de Oslo I por el que acordaban cinco años de negociaciones bilaterales para conseguir la paz y la creación del Estado Palestino. Se obviaron temas como el estatus de Jerusalén, las colonias israelíes y el retorno de los refugiados; estos son hoy los principales escollos en las negociaciones que, lejos de durar un lustro, ya van por el cuarto de siglo.

El huracán Florence, ya degradado a tormenta tropical, continúa provocando estragos, destrozos e inundaciones en Carolina del Norte. En el estado hay al menos 18 muertos, 15.000 personas han sido reubicadas en albergues y 900 han sido rescatadas de viviendas y coches, mientras más de 850.000 se han quedado sin electricidad. La localidad de Wilmington ha quedado completamente aislada del resto del estado norteamericano, mientras la tormenta avanza hacia Virginia dejando fuertes lluvias.

La tormenta tropical Florence no da tregua en la costa sureste de Estados Unidos y sus fuertes vientos y "épicas" lluvias han causado la muerte de al menos 11 personas, así como la notable crecida de unos ríos y lagos que comienzan a desbordarse en las carolinas.

Los trabajos para recuperar el fluido eléctrico prosiguen y se han reducido el número de personas afectadas por los cortes del suministro, mientras cerca de 800.000 clientes permanecen sin servicio eléctrico a la espera de que Florence acelere su desplazamiento y se lleve consigo las lluvias hacia el norte, a donde se desplazará en los próximos días.

Una vez que dejó atrás la condición de huracán y Florence se degradó a tormenta tropical, con vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora, la preocupación de las autoridades son las incesantes precipitaciones.

Las lluvias "épicas", tal y como las ha calificado el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, han llevado a batir un récord de acumulación de agua, con más de 76 centímetros en la ciudad de Swansboro, mientras que hay otras cuatro más por encima de los 50 centímetros.

Cinco personas han muerto y decenas más quedaron atrapadas en viviendas de Carolina del Norte tras el desbordamiento de varios ríos debido a Florence, que tocó tierra este viernes mañana en el sureste de Estados Unidos como huracán, y los meteorólogos alertan de que las inundaciones van a empeorar.

Pero la mayor preocupación de las autoridades no radica en las fuertes ráfagas, pues, aunque el ciclón ha perdido buena parte del furor de sus vientos desde que alcanzaba el nivel 4 en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de 5, mantiene el agua que arrastra, tanto en lluvias como en la intensidad de la marejada ciclónica.

Estos dos factores llevaron a que ríos como el Neuse y Pungo se desbordasen en sus desembocaduras e inundasen ciudades como New Bern y Belhaven, y dejasen atrapadas a decenas de personas, que se vieron obligadas a subir a los áticos o techos de sus viviendas a la espera de la llegada de las unidades de socorro.

Pero, con vientos sostenidos de unos 150 kilómetros por hora, esta tarea no fue sencilla, y las autoridades pidieron a unos 150 de los afectados que aguantasen como pudiesen pues las condiciones impedían su rescate.

Esto sucedió incluso antes de que Florence embistiese la costa sureste a las 7.15 hora local (11.15 GMT) en Wrightsville Beach, en Carolina del Norte, según datos del Centro Nacional de Huracanes (NHC), que anticipa "catastróficas" inundaciones para los próximos días.

El huracán Florence ha tocado ya tierra en Carolina del Norte con vientos que superan los 150 kilómetros por hora. Ya hay decenas de localidades inundadas, decenas de miles de personas están afectadas por cortes de luz y se está comenzando a evacuar a personas que han quedado atrapadas en sus casas. Las autoridades recomiendan que nadie intente ya irse en coche de la zona. Un equipo de TVE está en la zona.