El 4 de mayo es martes y aunque no es la primera vez que ocurre, no es habitual que las elecciones coincidan con un día laborable. En esta ocasión es así porque la ley establece que sean 54 días después de su convocatoria. Según los expertos, esto puede desmotivar a algunas personas aunque para ir a votar, los trabajadores tienen derecho a hacerlo dentro de su jornada laboral.
FOTO: Una operaria trabaja en una fábrica en Tres Cantos, Madrid. Rodrigo Jiménez/EFE