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  • Científicos españoles han investigado la perturbación durante 6 meses
  • La tormenta llega con diez años de adelanto
  • Su estudio puede ayudar a comprender fenómenos en la Tierra
  • La observación número un millón fue llevada a cabo el pasado lunes
  • El Hubble se centró en el análisis químico de un exoplaneta
  • Ha recopilado más de 50 terabytes de información en 21 años

La imagen del día nos lleva a mirar el cielo. Un eclipse lunar se ha podido observar en España desde el atardecer de este miércoles hasta la medianoche. El fenómeno tiene al Teide como testigo de excepción. Sin embargo, el cielo no ha sido esta noche el mejor aliado para contemplar el eclipse total de luna, ya que las nubes han impedido a los miles de científicos y aficionados que se han concentrado en numerosos espacios abiertos del país disfrutar de un espectáculo que no se volverá a repetir hasta el 27 de julio de 2018.

Una nueva explosión solar de grandes dimensiones ha sido captada por el Observatorio Solar Dinámico de la NASA. De acuerdo a la NASA, la explosión llegó tras una tormenta solar menor y una espectacular expulsión de masa con forma de hongo, que al caer de nuevo cubrió casi la mitad de la superficie solar.

Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto esta nueva clase de planetas del tamaño de Júpiter que flotan en la oscuridad del espacio, lejos de la luz de una estrella y que hasta ahora habían pasado desapercibidos. Los expertos creen que estos cuerpos "viven en soledad" tras ser "expulsados del desarrollo de sistemas planetarios". Los planetas se detectaron gracias a la técnica de microlente gravitatorio que escanea la luz en la Vía Láctea en busca de eventos gravitacionales. Consiste en curvar la luz de los planetas más lejanos y aumentarla por la gravedad de las estrellas. VÍDEO: NASA/JPL

El Hubble, el telescopio espacial más famoso se lanzó hace 21 años. Su espejo primario se pulió durante un año hasta alcanzar una precisión de una diezmilésima parte del ancho de un pelo humano. Pero al lanzarlo al espacio, el Hubble era miope. Un error de una milésima parte de un milímetro provocó que, los tres primeros años, sus imágenes fuesen algo borrosas. En 1993 le instalaron unas lentes correctoras y el problema se corrigió. Desde entonces, 1 de cada 4 investigaciones astronómicas se han hecho gracias al Hubble. En 2012 será sustituido por el telescopio James Webb.

Es esta y reproduce un tercio del Universo. Para fabricarla se han recopilado millones de imágenes obtenidas durante la última década. La foto final tiene más de un billón de píxeles. Es tan grande y tan detallada que se necesitarían 500.000 televisores de alta definición para poder verla en su resolución completa. Con ella, los astrónomos podrán medir las distancias a más de un millón de galaxias.

Las fotografías que realiza el telescopio espacial Hubble, son originalmente en blanco y negro y no en color, como estamos acostumbrados a verlas. Los expertos de la NASA y la ESA colorean las fotografías según los elementos químicos detectados por los instrumentos del telescopio. Se puede tardar cerca de un año en formar una imagen completa de una nebulosa a partir de las fotografías parciales realizadas por el telescopio

Los radiotelescopios son enormes antenas parabólicas blancas. Suelen estar pintadas así porque este color refleja la luz solar y el calor. El blanco minimiza los cambios de temperatura y eso permite tener una visión correcta de los distintos objetos del Universo que se están observando. En cambio el color negro absorbe el calor. Por eso si el telescopio tuviera esta tonalidad se alteraría la recepción de la señal del objeto que se está observando y su visión no sería la correcta.