Constantino II y Ana María de Grecia: de su romántica historia de amor a su fastuosa boda

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Constantino II y Ana María de Grecia se casaron en 1964 en Atenas

Su boda fue todo un acontecimiento. El 18 de septiembre de 1964 Grecia celebró la boda de su rey, el último del país heleno, con la princesa Ana María de Dinamarca, un enlace oficiado en el corazón de Atenas. La catedral de la Anunciación de Santa María fue testigo del amor que se profesaban Constantino II de Grecia y Ana María, tremendamente jóvenes: Constantino, con solo 24 años, ascendió al trono aquel mismo 1964, seis meses antes, mientras que Ana María acababa de cumplir los 18 años en agosto.

Estaban muy enamorados, una devoción de la que continuaron presumiendo en los años siguientes, no faltos de desafíos: tras un breve reinado tuvieron que abandonar Grecia y vivir en el exilio. Constantino II pudo volver a vivir en su tierra décadas más tarde y es allí donde ha fallecido este martes, con toda su familia a su lado. Tras 58 años de matrimonio, Ana María dice adiós al amor de su vida.

¿Cómo se conocieron Constantino II de Grecia y Ana María?

Ana María era prácticamente una niña cuando conoció a su futuro marido. Cuentan que coincidieron en Copenhage durante una visita y ya entonces el rey Pablo de Grecia soñó con que su hijo uniera su vida a la de la princesa danesa, la hija menor del rey Federico IX y hermana pequeña de la actual monarca de Dinamarca, la reina Margarita. "Fíjate en Ana María: parece una mariposa. Espero que algún día, Tino se case con ella", le diría Pablo de Grecia a su mujer, la reina Federica, como recoge Vanity Fair. El joven Constantino, heredero al trono, tenía entonces 19 años; Ana María, solo 13.

Constantino II, entonces príncipe heredero de Grecia, y la princesa Ana María de Dinamarca en 1963 Erik Petersen/Ritzau Scanpix via AP

Cinco años después, a los seis meses de la muerte del rey Pablo y el ascenso al trono de Constantino II, la joven pareja celebró su boda en Atenas, justo en el mismo templo ortodoxo en el que la hermana del entonces monarca y posterior reina de España, Sofía, se había casado con Juan Carlos de Borbón. Ya en aquella otra boda real era evidente el afecto que se tenían Constantino y Ana María.

"Durante la recepción celebrada después de la boda de Sofía, Tino bailó solamente con la princesa Ana María de Dinamarca. Yo le dije en voz baja: 'haz el favor de atender también a las otras chicas'", recordaría la reina Federica en sus memorias, según Vanity Fair. Constantino, sin embargo, se negó. "No quiero que nadie pueda pensar de Ana María lo mismo que yo pienso", fue su respuesta.

Una preciosa boda en Atenas

Varias semanas después de que Ana María cumpliese los 18 años se casó con Constantino. Luciendo un velo y una preciada diadema de diamantes de Cartier de su familia -accesorios que también usarían más tarde sus hermanas, la reina Margarita y la princesa Benedicta de Dinamarca-, pasó de ser Ana María de Dinamarca a Ana María de Grecia. A la romántica boda acudieron las otras monarquías europeas, con invitados como Balduino y Fabiola de Bélgica, Rainiero de Mónaco o Juan Carlos de Borbón y Sofía, la hermana del novio. Fue el principio de sus 58 años juntos, en los que tendrían cinco hijos, que hoy lloran la muerte de su padre.

Constantino II y Ana María de Grecia el día de su boda junto a miembros de su familia y damas de honor Vagn Hansen/Ritzau Scanpix via AP