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Paco Mir, dibujando el humor

  • Cayetana entrevista a Paco Mir en el plató de Atención Obras
  • Paco Mir es uno de los actores del Tricicle
  • Es el más tímido de los tres

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Atención Obras - Entrevista a Paco Mir

¡Atención obras!

La agenda cultural de La 2 se emite cada viernes, a las 20.00 horas.

Siempre me gustaron los Tricicle. Me he reído mucho con ellos. Invitamos a plató a uno de sus componentes, Paco Mir, el más tímido, según nos contaron ellos mismos. Paco lo confirmó con un chiste. Me llamo “Parco Mir”, me dijo en la sala de invitados.

         Había varias cosas que rondaban en mi cabeza mientras preparaba la entrevista. Me preguntaba por el silencio, porque lo normal es que los humoristas hablen mucho y basen la mayor parte de sus chistes en los diálogos, en equívocos verbales. ¿A qué venía lo de hacer humor “gestual”?

         Pensé que igual se debía a que eran tres. La dualidad permite los opuestos (payaso listo, payaso tonto) y los opuestos, el conflicto y el diálogo. Se lo expusimos a Paco y dijo algo que me sorprendió, que aunque ellos eran un trío, interactúan de dos en dos. Empieza uno siendo el poderoso y otro el débil y que, mientras se desarrollaba el sketch, los papeles se iban cambiando. El débil se hacía fuerte y el fuerte salía trasquilado. Ironías del humor. Así el trío, como tal, no jugaba.

Si no hablas, basas tu interpretación en gestos, en imágenes, piensas en imágenes

         Habló con fuerza de su faceta de dibujante.  Cayetana le preguntó por el origen de las ideas de Tricile y él nos dijo que normalmente partían de un dibujo, como ésos que se hacen sobre manteles de papel. Una imagen. Esto nos devuelve al silencio. Si no hablas, basas tu interpretación en gestos, en imágenes, piensas en imágenes.

Atención Obras - Cayetana Entrevista a Paco Mir - Fragmento

         Lo curioso de este tipo de trabajo, que enlaza por ejemplo con el que Rowan Atkinson hace cuando encarna a Mr Bean, pone es escena sin mediar palabra, la mezquindad, la picardía, la debilidad de nuestra naturaleza. Y todos lo entendemos perfectamente. Es más, aunque las situaciones planteadas sean simples, salimos del teatro con la sensación de que hemos sido retratados en  nuestra complejidad.

         A lo mejor el secreto de su efectividad reside en la simplicidad de las líneas, gestuales o de lápiz. Quizá el humor hablado se basa en equívocos verbales porque el lenguaje ensucia las situaciones, las hace confusas y entonces aparecemos hechos un borrón. Quizá, y lo estoy pensando ahora al escribir, el lenguaje verbal habla de nuestra habilidad para ocultar lo que nos pasa y el gesto revela la presencia de lo que callamos.