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Will Smith revela cómo su vida estuvo marcada por la violencia de género

  • El actor se prepara para publicar sus memorias en España
  • Ha anunciado que estará en El Hormiguero presentando su libro

Por
Will Smith
Will Smith

Will Smith no para. Se encuentra en plena promoción de su película King Richard y ayer lo vimos entonar de nuevo la mítica intro de 'El príncipe de Bel-Air' para presentar el lanzamiento del remake de la serie que le dio la fama. La serie que lo hizo conocido a nivel mundial, aunque él ya tenía su público como rapero, vuelve en una versión mucho más seria y realista que la original. Pero esta no es la única novedad que nos trae el reconocido actor.

El próximo 1 de diciembre sale a la venta en España su autobiografía. Unas memorias, escritas con la ayuda de Mark Manson (autor de 'El sutil arte de que casi todo te importe una mierda'),  cargadas de sorpresas. Smith se sincera y cuenta uno de los episodios más dolorosos de su infancia. "Cuando tenía 9 años vi cómo mi padre le daba un puñetazo a mi madre en la sien con tanta fuerza que se desplomó. La vi escupir sangre. Ese momento, en ese dormitorio, probablemente más que cualquier otro momento de mi vida, ha definido lo que soy ahora".

El protagonista de "En busca de la felicidad" ha explicado cómo ese momento ha marcado el resto de su vida. "Todo lo que he conseguido desde entonces, los premios y los reconocimientos, los focos y la atención mediática, los personajes y las risas, han estado marcados por un sutil deseo reiterado de pedir perdón a mi madre por mi inacción aquel día", reconoce desde el arrepentimiento.

La rabia que sentía el intérprete de 'Soy Leyenda' era tal, que en un momento del libro, confiesa que tuvo deseos incluso de matar a su padre, cuando este estaba mayor y dependiente. "Me detuve en las escaleras. Podría haberlo empujado escaleras abajo, nadie habría sospechado nada", escribe.  "Décadas de dolor, ira y de resentimiento vinieron y se fueron. Sacudí la cabeza y seguí empujando a mi padre hasta el cuarto de baño".

Está claro que este tipo de episodios son imposibles de olvidar y que en muchas personas marcan su camino y su personalidad. A Will le pasó. Alcanzó la fama siendo muy joven y no fue capaz de gestionarlo. Pasó de ser un niño de clase media a una estrella de Hollywood. "Tuve sexo con muchas mujeres y fue muy desagradable para mí", señala. En sus memorias el actor relata cómo, pese a sentir que había ganado la lotería de la vida, su familia no lo veía así y se sentían como "artistas invitados" en el circo de su vida.

Así describe Will cómo vivió el proceso de hacerse famoso: "Fui a un colegio católico con una mayoría de niños blancos hasta los 14 años, mi madre tenía formación universitaria y mi padre, pese a sus todos defectos, siempre trajo comida a la mesa y habría preferido morir antes que abandonar a sus hijos", recuerda. Sin embargo, una vez que ganó su primer millón de dólares con apenas 20 años, sí comenzó a rodearse de traficantes de drogas, cuenta, y a despilfarrar su fortuna sin control.

En una reciente entrevista en el Savoy Theater de Londres con el también actor Idris Elba contó el momento en el que tocó fondo. Puede parecer el guion de una de sus películas, pero nada más lejos de la realidad. Smith desveló que en aquella época tuvo que pagar una considerable multa que le puso Hacienda por no pagar impuestos y que le dejó en la bancarrota. Por aquel entonces, no le quedó más remedio que vender todas sus propiedades y pedir prestados 10.000 dólares a un amigo traficante para mudarse a Los Ángeles y retomar su carrera de actor.