Una cura para todos los males

Los Dales están atravesando un duro invierno. Siegfried tiene gripe y la carga de trabajo de James se ha duplicado. Dick Rudd lo llama para que examine a su vaca de pedigrí, que lucha por respirar. James se alarma al descubrir que tiene un absceso en la garganta y teme que si continúa creciendo morirá asfixiada. Dick está devastado. Invirtió los ahorros de toda su familia en la vaca, por recomendación de James, con la esperanza de que ella fuera la génesis de un nuevo rebaño. Los intentos de James de tratar a la vaca fracasan y parece desesperado.