Incógnitas y lecciones una semana después del apagón

Una semana después del histórico apagón del 28 de abril en la península Ibérica, la oscuridad sigue en torno a las causas del incidente y las medidas a tomar para evitar que ocurra de nuevo.

La confusión sigue también entre la población que, a partir de las 12:33 hora peninsular española del pasado lunes, no solo estuvo incomunicada por la falta de cobertura e internet durante horas, sino que, en muchos casos, hubo personas que se quedaron encerradas en trenes o ascensores. Otros tuvieron que caminar durante horas debido al bloqueo de las carreteras e incluso hubo quien no pudo cocinar o comprar con normalidad ante las largas colas en los supermercados. La incertidumbre se cernió, asimismo, entre los electrodependientes, que temieron por el abastecimiento de sus máquinas o las personas que tenían programadas operaciones aquel día.