Sinopsis
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha reconocido este martes que hay pedir disculpas "en nombre del Estado" por las "resoluciones sorpresivas" y las rebajas de penas con la ley del 'solo sí es sí', pero defiende que no se puede "legislar sin sentencias firmes".
"Claro que hay que solidarizarse y pedir disculpas por esas resoluciones judiciales sorpresivas, muchas de las cuales serán revocadas y muchas recurridas, pero no se puede legislar sin sentencias firmes", ha dicho en una entrevista en La noche en 24 horas, en la que ha asegurado que ninguna de las rebajas de penas ha sido por "entender que no había violencia o intimidación", uno de los puntos claves en el debate de la reforma.
La Comisión de Justicia del Congreso ha aprobado este martes el dictamen de la reforma de la ley del 'solo sí es sí' presentada por el PSOE gracias al apoyo del PP, superando así el último paso antes de que esta norma se debata y vote en el pleno de la Cámara Baja el próximo jueves. Sin embargo, la proposición de ley impulsada por los socialistas ha contado conel voto en contra de Unidas Podemos, ERC y EH-Bildu, que apuestan por dejar "el consentimiento en el centro de la norma".
En este contexto, Rosell ha instado al PSOE a "escuchar a su socio" y "no coger de la mano a la derecha antifeminista" para reformar una ley sobre la que, ha recordado, no se ha pronunciado el Tribunal Supremo "ni una sola vez". "Es muy inconveniente para un país tener tres códigos penales en seis meses", ha recalcado.
Preguntada por el motivo detrás de la decisión del PSOE de pactar la reforma con el PP, la delegada del Gobierno ha opinado que se debe a las "las presiones, las prisas, los estudios demoscópicos y la cercanía con procesos electorales". Frente a esto, ha insistido: "Es mucho más cómodo negociar con nosotras en una mesa, con sentencias, penas encima de la mesa, cálculos reales, expertos de alta cualificación".
