La decisión del actual presidente del Consejo Charles Michel de presentarse a las elecciones europeas de junio por el partido reformista belga (MR) ha provocado un terremoto político en Bruselas.
Michel tendrá que dejar el cargo cuatro meses antes de lo previsto en julio y no en noviembre. Eso obliga a buscarle rápido un sustituto para evitar además que le sustituya provisionalmente quien es el líder europeo más discutido, Víktor Orban, porque Hungría asume la presidencia de la UE en el segundo semestre de 2024.
Gustavo Palomares, catedrático Europeo Jean Monnet en políticas de la UE en la UNED, cree que ha sido una decisión en la que ha primado más su interés personal que la situación en la que deja al conjunto de la Unión, aunque cree que hay tiempo para forzar el consenso para sustituir a Michel.
