Gloria Cuenca-Bescós (II)

Nació en Venezuela en 1958 y creció allí hasta los 14 años, entre Lagunillas del Zulia y Caracas. Su vida cambió por completo cuando sus padres decidieron volver a Zaragoza, de donde su madre era natural. Los estudios, la forma de hablar, la libertad de salir con las numerosas primas y amigas que hizo - casi al instante - le hicieron a Gloria amar Aragón. Además, su padre la llevó a los rincones más bonitos de esa tierra, (Loarre, Sierra de Alcubierre, Teruel...). No sabe si fueron tales andanzas adolescentes, o que ya había una semilla creciendo dentro, que comenzó la carrera y estudió rocas que se transformaban en la historia de nuestro planeta, cuando las enseñaban los profesores de Geología de la Universidad de Zaragoza. Pepita, Constanza, Eladio, Juan, Mateo, Pep, Vicente, Joaquín, Eustaquio, Emiliano, Leandro... Gloria les agradece haberle dado la herramienta más maravillosa del mundo - según sus palabras - el placer de admirar el paisaje y adquirir conocimientos de las rocas, los torturados pliegues, los estratos, los volcanes, los fósiles y las minas de este vasto territorio que es España.