El bosque habitado   Poesía, Naturaleza y Bondad 08/08/2021 58:28

Bienvenid@s a un bosque habitado absolutamente por la Poesía, la Naturaleza y la Bondad. Un bosque sembrado literariamente por Rosa Barasoain y Fernando López de La La Fertilidad de la Tierra, que se enamoraron de un poema titulado “La bondad” y a partir de entonces investigaron, trabajaron y tradujeron (junto a María José Barasoain) unas primorosas piezas potéticas y las publicaron en su editorial Tierra de Sueños como una antología titulada “Poemas al lado de la Naturaleza”. Si lees estos poemas qué aprenderás? Que la belleza no puede pasar desapercibida, que la bondad no dejará de recibir su reconocimiento, que la autenticidad se abre camino a través de los tiempos.

Bienvenid@s, pues, a un bosque habitado por 87 poemas escritos al lado de la Naturaleza por un poeta vinculado a ella durante toda su vida… Poemas de un maestro de escuela belga que reflejan la calma y la tranquilidad que emanan de la cotidiana presencia de Maurice Carême en los paisajes que tanto admiraba, paisajes de campo, de pueblo, de senderos y jardines, y la vida sencilla que eligió vivir en un entorno rural que compartía y sigue compartiendo con los habitantes del bosque.

Sí, porque las claves de Maurice Carême son la imaginación, la contemplación de la Natura, la intuición de que el mundo sencillo puede ser la semilla de otro mundo mejor. Todo ello envuelto en la musicalidad de Carême que en este programa completamos con canciones de Depedro y la certeza de que “Todo va a salir bien”. También las palabras escritas de Raúl de Tapia que es Raúl Alcanduerca y de Mar Verdejo. Además, las noticias arbóreas de “Las ramas arriba” con el plantabosques Natxo Blanchart López de la Asociación Arriba las Ramas. Club de la Hojarasca: José Manuel Sebastián, Isabel Ruíz Lara y Carolina Alba (enamorad@s perdid@s hasta enmudecer).

Y ahora, si quieres experimentar la que experimentamos con Maurice Carême, Rosa Barasoain y la Fertilidad de la Tierra, te invitamos a que busques tu propia voz, olvides lenguajes rebuscados, que escuches la voz de los árboles, de las raíces, de las gotas que caen del cántaro y, con los trinos de las aves y el viento sobre los trigales, habites ese lado de la Naturaleza donde todo es, sin duda, territorio conmovido… ¡Arriba las ramas!

El bosque habitado
Más opciones