Controlar un solo satélite en órbita ya es bastante difícil, pero supervisar un par de satélites mientras vuelan en formación cercana uno alrededor del otro es un desafío casi imposible. La Agencia Espacial Europea ha unido a cuarenta empresas europeas y canadienses bajo el liderazgo presupuestario de España y Bélgica con el fin de probar una tecnología avanzada y estudiar la corona solar, la capa más externa y menos densa del Sol. Esta misión, conocida como Proba-3 busca demostrar la tecnología de vuelo en formación de precisión en órbita, para ello, los satélites Coronagraph y Occulter que protagonizarán la coreografía ya se encuentran en la fase final de pruebas y simulaciones. Una vez lanzados los satélites entrarán en órbita y comenzarán la danza cósmica sin intervención humana adaptando sus movimientos con una precisión milimétrica a una velocidad que variará desde los 3.600 kilómetros por hora hasta los 36.000 km/h.
Además de la demostración tecnológica, este vuelo sincronizado permitirá simular el eclipse solar y obtener imágenes de la corona solar, lo que contribuirá al estudio de fenómenos solares como las tormentas geomagnéticas. La misión durará alrededor de dos años tras lo cual los satélites se desintegrarán en la atmósfera terrestre. Para conocer mejor esta misión hablamos con Esther Bastida, Ingeniera de sistemas y de software de la misión. Descubrimos los sistemas de realidad virtual free roam gracias a Paloma Cortés, portavoz de Zero Latency. Y vuelve "Frecuencia Digital" donde nos adentramos en la reciente investigación del Laboratorio de Innovación de RTVE en el contenido al que se ven expuestos los niños en TikTok.
