Los mapas de las migraciones tras la pandemia: los municipios que más población ganan y pierden

• El saldo con el exterior alcanzó en 2022 la cifra más elevada en 15 años y las zonas rurales perdieron atractivo
• Madrid y Barcelona pierden población por migraciones internas pero lo compensan con las migraciones exteriores

Oropesa del Mar, el municipio que más población ha ganado por las migraciones, Formentera, el que menos

España registró en 2022 el saldo migratorio exterior -la diferencia entre inmigraciones y emigraciones- más alto de, al menos, los últimos 15 años con la llegada de 727.005 personas más de las que se fueron tras el freno que supuso la pandemia. Este crecimiento por las llegadas desde otros países -entre ellas las de más de 80.000 ucranianos por la guerra- se da a la vez que las migraciones interiores vuelven a reproducir el patrón previo a la crisis sanitaria: las zonas rurales dejan de atraer población como hicieron con el confinamiento mientras las zonas suburbanas de las grandes ciudades como Madrid y Barcelona se mantienen como polos de atracción.

El año pasado llegaron a España 1.258.894 personas procedentes del extranjero, emigraron a otros países 531.889 y cambiaron de municipio dentro del mismo Estado otras 1.725.546 personas (el 3,2% de la población), según los datos de la nueva Estadística de Migraciones y Cambios de Residencia publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística.

En DatosRTVE hemos analizado los municipios que más población atrajeron en relación a su población media durante 2022 teniendo en cuenta el saldo migratorio interior y exterior por separado -plasmados en los dos mapas anteriores- y el saldo migratorio total -en un tercer mapa, más adelante- para ver qué zonas son las más atractivas. De las principales ciudades de España, todas menos Fuenlabrada y Coslada, en Madrid, Linares en Jaén, Cádiz capital y Ceuta han ganado población gracias a las migraciones, según destaca el INE. Si se amplía el foco a todas las que tienen más de 10.000 habitantes, la más 'atractiva' fue Oropesa del Mar, en Castellón, y la que más población perdió por migraciones en relación a su tamaño fue Formentera, en Baleares.

Migraciones internas: vuelta al patrón prepandémico

"En el mapa de las migraciones internas se ve sobre todo que los municipios que rodean Madrid, por su suburbanización, son los que más población ganan. Se ve una mancha alrededor de Madrid de color rojo que destaca bastante y también se ven los municipios rurales de Castilla y León y Aragón en color azul más intenso, que son los que más población pierden", explica a RTVE.es Miguel González-Leonardo, investigador del Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales de El Colegio de México y del International Institute for Applied System Analysis, de Austria.

Este experto, autor de estudios como ¿Renacimiento rural? El aumento de la migración interna a zonas rurales durante la pandemia de COVID-19 o Entendiendo los patrones de la migración interna durante la pandemia en España, señala que los datos de 2022 apuntan a que "el auge de las zonas rurales que hubo durante los años de la pandemia prácticamente ha desaparecido (...) La gente que empezó a llegar a las zonas rurales durante la pandemia y el confinamiento parece que ha dejado de llegar, tenemos ahora un mapa más parecido al que teníamos en 2019".

El director del Instituto de Economía, Geografía y Demografía del CSIC, Diego Ramiro, señala en el mismo sentido que el movimiento hacia zonas rurales durante la pandemia "no ha sido una tendencia a largo plazo sino algo coyuntural" porque los cambios de residencia se produjeron durante las olas pandémicas pero "luego la gente retornó a las zonas urbanas donde vivían".

El municipio que más crece en términos relativos por las migraciones interiores de los de más de 10.000 habitantes es Villalbilla, en Madrid. El que más población ha perdido por cambios residenciales es Los Llanos de Aridane por la erupción del volcán de La Palma. Al margen de esta localidad canaria, se encuentra Beniel, en Murcia, como el segundo municipio que más población relativa ha perdido por cambios de residencia dentro del mismo país.

El "efecto rebote" de la migración exterior

En el mapa de migración exterior por municipios, puede apreciarse como solo 823 municipios de los 8.131 que tiene España tuvieron un saldo negativo y cómo las grandes ciudades siguen siendo un polo de atracción para este tipo de movimientos.

El saldo migratorio exterior de récord de 2022 se debe, según González-Leonardo, a un "efecto rebote" tras la pandemia. "Durante esta cayeron los flujos de inmigración; la llegada desde otros países, en torno al 40%. En 2021 continuaron cifras también bajas, pero parece que en 2022 los flujos han crecido de nuevo, incluso, por encima de los valores que se venían registrando en los años anteriores".

Diego Ramiro recuerda que entre 2000 y 2008 llegaron a España cinco millones de extranjeros y que, tras el freno de llegadas que supuso la gran crisis económica, volvieron a crecer las migraciones aunque no a los mismos niveles. "Hubo de nuevo un freno durante la COVID y vuelta a recuperarse de nuevo", añade.

De los municipios más grandes de España, los que más población relativa han ganado por la llegada de personas de otros países son Torrevieja, en Alicante, y Lloret de Mar, en Girona. En el extremo contrario, está Formentera.

Madrid y Barcelona: saldo final positivo por las migraciones exteriores

Los mapas de los saldos migratorios interior y exterior expresados en tasas por cada 1.000 habitantes muestran claramente cómo las grandes ciudades como Madrid o Barcelona pierden población por los cambios de residencia dentro de España pero lo compensan con las llegadas del extranjero -hasta tener un saldo total positivo- al ser focos de atracción económica.

"Estas grandes ciudades pierden población no tanto por migración [interna] de larga distancia sino por la suburbanización [población que se marcha a municipios cercanos a vivir]. Se va más gente de la que llega, pero ganan población por migración externa", detalla González-Leonardo sobre un fenómeno que ha estudiado en profundidad.

Madrid tuvo un saldo total neto de 78.181 habitantes más en 2022 a pesar de que se mudaron a otros municipios de España 11.566 personas más de las que se fueron a vivir a la capital española procedentes de otras partes del territorio nacional. Sin embargo, el saldo exterior fue de 89.747 personas. En el caso de Barcelona pasa lo mismo: en total ganó 45.858 habitantes por las migraciones gracias a que el saldo exterior (55.386) compensó la pérdida de población por cambios residenciales intermunicipales (-9.528).

En la siguiente tabla pueden consultarse los datos de los 773 municipios con más de 10.000 habitantes: saldo total, exterior e interior en términos absolutos y también referenciados a la población con tasas por cada 1.000 habitantes si ves esta noticia en un ordenador y solo las tasas si la lees desde el móvil.