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Grecia supera 'in extremis' la suspensión de pagos por si sola

  • Atenas devuelve a la UE 5.000 millones con letras que ha colocado esta semana
  • Para evitar otra situación límite espera el desbloqueo del rescate por la troika

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Después de que acudiese al mercado esta semana para financiarse, finalmente Grecia va a poder devolver este viernes los 5.000 millones de euros que debía a sus prestamistas internacionales, una deuda que amenazó de nuevo con la declaración de suspensión de pagos del país.

"El Estado tiene el dinero necesario”, ha confirmado la Agencia de Gestión de la Deuda Pública helena (PDMA, por sus siglas en inglés).

Toda vez que la troika de prestamistas (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) había aplazado su siguiente préstamo a Grecia, para conseguir hacer frente por sí mismo a este pago el Tesoro emitió este martes letras en una subasta extraordinaria.

Hasta esta semana, Atenas había evocado insistentemente el riesgo de suspender pagos si la troika no desbloqueaba el siguiente tramo del segundo rescate al país, pendiente desde hace muchos meses ante las exigencias de nuevos recortes, reformas y garantías por los acreedores; y la dificultad política interna para seguir con esas políticas (con dos elecciones de por medio) que han empobrecido notablemente a la población.

Es la segunda vez desde agosto que Grecia tiene que pedir dinero en emisiones de deuda a muy corto plazo (a uno y tres meses al 3,95% y 4,2%, respectivamente) por algo más de 4.000 millones, que elevó a 5.000 este jueves con una ampliación de esa colocación.

Con el mercado a largo plazo cerrado, la sobreendeudada Grecia suele emitir cada mes letras a tres y seis meses aunque normalmente por menos de 2.000 millones. El ministro de Finanzas, Yannos Stournaras, advirtió no obstante este martes que estas operaciones tienen sus límites.

Tras aplazar varias veces en las últimas semanas su decisión sobre Grecia, se espera que el Eurogrupo tome definitivamente una decisión este próximo martes ya que ha convocado la cita expresamente para eso. En este momento, la UE --principal acreedor-- parece dispuesta a desbloquear la ayuda pero discrepa con el FMI sobre la viabilidad futura del país.