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El G-7 adelanta la recuperación a este mismo año

  • Consideran que lo peor ya ha pasado aunque no dan por terminada la recesión
  • El comisario europeo Almunia habla de optimismo moderado
  • Coinciden con el FMI es que es indispensable sanear el sistema financiero
  • El G-7 se reúne informalmente esta noche con el G-20, un gesto hacia los países emergentes
  • España no está invitada, aunque participa en la reunión del FMI

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Macklem, Bernanke, Geithner and Sobel sit down for a meeting of the G7 finance ministers and governors at the Treasury Department in Washington
Tiff Macklem, Ben Bernanke, Timothy Geithner y Mark Sobel en el encuentro del G-7.

Los ministros de Finanzas del G-7, el grupo de naciones más desarrolladas, prevén que la economía mundial empiece a recuperarse este mismo año. Consideran que se acumulan las pruebas de que lo peor de la recesión se ha acabado, según la declarción final de la reunión que han mantenido este viernes.

"La actividad económica debería empezar a recuperarse a lo largo de este año, aunque el panorama seguirá siendo débil y persisten los riesgos de empeoramiento", señala el texto. "Los datos más recientes sugieren que el ritmo de caída de nuestras economías se ha frenado y emergen algunas señales de estabilización".

Así, el comisario de Economía de la Unión Europea, Joaquín Almunia, ha señalado tras el encuentro que el grupo de los países más ricos del mundo evalúa la situación actual con "moderado optimismo".

El G-7 se desmarca de los pronósticos mucho más pesimistas que hace el Fondo Monetario Internacional, que aplaza la recuperación económica al año que viene. Con matices. El club de los países más ricos no se atreve abiertamente a dar por terminada la peor recesión desde la segunda Guerra Mundial. Persisten las amenazas que generan las pérdidas del sector financiero y el desempleo.

Porque al margen de la disparidad de opiniones sobre el momento de la recuperación, el Fondo y el G-7 coinciden en un punto. La salida del túnel no será posible hasta que se limpien los bancos. El FMI calcula que las pérdidas globales pueden rebasar los 4 billones, con B, de dólares. Y estima que los bancos necesitarán otra inyección para salir adelante. 550.000 millones en Estados Unidos y 750.000 millones en la eurozona.

Los bancos en el punto de mira

Precisamente este viernes, la Reserva Federal ha señalado que la recesión y el tsunami financiero han reducido "sustancialmente" las reservas de los 19 principales bancos de EE.UU. No obstante, asegura que la mayoría de las entidades disponen de capital de sobra según las normas.

La administración Obama ha sometido a pruebas de resistencia a esta veintena de entidades para establecer su viabilidad. Se espera que publiquen los resultados el próximo 4 de mayo.

El G-7 se ha comprometido a tomar medidas según sea necesario: suministrar liquidez, inyectar capital, proteger los ahorros y extraer los activos tóxicos. El FMI ha abogado explícitamente por la nacionalización de las entidades con problemas. Bien por la puerta de atrás, comprando acciones o convirtiendo en ordinarias las preferentes, bien por la puerta delantera, con los gobiernos asumiendo directamente el control de los bancos.

El G-7 se suma al G-20 sin España

Los ministros del G-7 se reunirán esta noche con sus homólogos del G-20. Es una señal de la globalidad de la crisis. De la necesidad de soluciones globales y coordinadas con los países emergentes.

La declaración final emitida por los países más ricos insiste en que "la volatilidad excesiva en los tipos de cambio tiene implicaciones graves para las economías" y da la bienvenida al compromiso de China de flexibilizar su divisa, al tiempo que la anima a continuar la apreciación del yuan.

España no está invitada a ninguna de ambas reuniones, a pesar de ser la octava potencia económica del mundo, ya que se trata únicamente de reuniones informales y no de una cumbre, como fueron las de Washington y Londres. La ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado sólo asistirá a la reunión de primavera del FMI y del Banco Mundial que se celebra este fin de semana en Washington.