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El primer ministro israelí, Ehud Olmert, afirma que dimitirá si es acusado de corrupción

  • La justicia israelí investiga al jefe del Ejecutivo por aceptar dinero de un empresario de EE.UU.
  • Es la cuarta vez que se le investiga por corrrución, aunque nunca ha sido acusado
  • Olmert reitera que nunca ha aceptado sobornos y que las sumas eran simples donaciones

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El primer ministro israelí, Ehud Olmert, al que la justicia israelí considera "sospechoso" de corrupción por aceptar dinero de un empresario estadounidense, ha asegurado que "nunca ha aceptado sobornos" y que solo dimitirá si es inculpado.

"Si el Fiscal general decide acusararme, dimitiré", ha dicho Olmert en una comparecencia a última hora del jueves. ¿Ouedo mirar a todo el mundo a los ojos y decir que nunca he aceptado sobornos. Nunca he tocado un penique¿, ha subrayado el jefe del Ejecutivo.

La investigación erosiona un poco más la credibilidad, muy dañada ya, del primer ministro israelí, que ya ha sido investigado con anterioridad en al menos tres ocasiones por supuestos casos de corrupción, aunque hasta ahora no ha sido llevado ante la justicia.

Sumas importantes de dinero

El ministerio de Justicia israelí ha confirmado, a través de un comunicado, que Olmert es sospechoso de corrupción por haber recibido del empresario estadounidense Morris Talansky "sumas importantes" y "no autorizadas" durante un amplio período "cuando era alcalde de Jerusalén y ministro de Industria y Comercio".

Se cree que Talansky, de 75 años y residente en Nueva York, recibió de diversas fuentes importantes sumas que transfirió a Olmert para financiar sus campañas electorales a la alcaldía de Jerusalén en 1993, 1998 y 1999, cuando militaba en el Likud.

Olmert ha admitido haber recibido dinero de Talansky, pero ha señalado que eran simples "contribuciones financieras" para respaldar la campaña y que las donaciones "no eran ilícitas". Las sumas aportadas se estiman en cientos de miles de dólares, según una fuente judicial citada por Reuters.

Con el propósito de no causar alarma social, la justicia local había prohibido a los medios israelíes informar sobre la investigación hasta que esta noche concluyeran las conmemoraciones del 60º aniversario de la creación del Estado de Israel. En medios políticos locales se considera que una eventual dimisión de Olmert frenaría en seco la negociación que el primer ministro israelí mantiene con el presidente palestino, Mahmud Abas, en el marco del llamado proceso de Annapolis.