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Real Madrid 3-0 Olympique de Lyon

El Madrid se reconcilia por fin con la Champions

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El Madrid rompió el maleficio

Ficha técnica:

3.- Real Madrid: Iker Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo; Khedira, Xabi Alonso; Di María (Granero, m.78), Özil, Cristiano Ronaldo (Adebayor, m.74); y Benzema (Lass, m.86).

0.- Lyon: Lloris; Réveillère, Cris, Lovren, Cissokho; Toulalan, Källström; Briand (Gomis, m.46), Gourcuff (Pied, m.69), Delgado (Pjanic, m.80); y Lisandro.

Goles:

1-0, m.37: Marcelo.

2-0, m.67: Benzema.

3-0, m.76: Di María.

Árbitro:

Damir Skomina (SLO). Amonestó a Pepe (9) y Carvalho (30) por el Real Madrid, y a Gourcuff (38) y Cissokho (54) por el Lyon.

Ya eran demasiados años de divorcio entre la máxima competición del fútbol, la Champions League, y el Real Madrid, el equipo que más veces ha besado la 'orejuda'. Después de seis años pegándosela en octavos, el equipo de Mourinho ha roto el gafe de la mejor manera posible, goleando a su bestia negra de Lyon. [Así hemos narrado el R. Madrid - O. de Lyon] [Estadísticas del partido]

El lateral Marcelo abrió el camino en la primera mitad y Di María junto a Benzema derribaron el muro francés en la segunda. Con la vuelta de Cristiano Ronaldo como la otra nota positiva del partido, el Madrid se va a la cama pensando en el sorteo que tendrá lugar el próximo viernes en la sede de la UEFA para conocer su rival. [Sorteo de los cuartos de la Champions League, en directo el viernes a las 12:00 h en RTVE.es]

La duda antes del partido era si el lesionado CR7 sería titular o no y el portugués fue finalmente de la partida en el once titular que saltó a un Santiago Bernabéu que no se llenó a pesar del llamamiento que habían hecho Mourinho y sus jugadores.

El comienzo fue eléctrico, con ataques veloces del Real Madrid, como los que recuerdan los aficionados veteranos en el coliseo blanco.

Los franceses aguantaron el arreón inicial y se decidieron a presionar la salida de balón que comenzaba en la defensa blanca aunque para ello se arriesgara a recibir algún que otro susto cuando Cristiano o Benzema buscaban la espalda de Cris y Lovren.

En las áreas técnicas, las caras eran diferentes en uno y otro bando. Al francés Puel se le veía cada vez más desahogado en su traje a medida que iban pasando los minutos mientras que a ‘Mou’ se le fruncía el ceño. Un gol en el primer cuarto de hora hubiera hecho desaparecer todos los fantasmas merengues sobre los octavos y eso el técnico portugués lo sabía.

La diferencia entre este partido y el del año pasado era que el 0-0 clasificaba esta vez al Real Madrid y eso obligaba al equipo galo a marcar. Poco a poco, liderados por Lisandro, el Olympique fue equilibrando la posesión y comenzaba a pisar el área del Madrid. La más clara la tuvo Delgado en un disparo cruzado al palo izquierdo de Casillas que precisó de la estirada del guardameta.

Al Madrid se le abrían los espacios para salir al contraataque y eso le encanta. Un cañonazo de CR7 en el minuto 26 que Lloris desvió a córner sirvió para sacudirse de la empanada momentánea blanca.

Corría el minuto 30 del choque y los dos centrales del Real Madrid ya habían visto como el árbitro Damir Skomina les había mostrado una tarjeta amarilla a cada uno. Este dato no llegó a ser analizado por los aficionados blancos porque en el 36’ llegó el primer gol.

Xabi Alonso robó el balón en el campo del Lyon y se lo cedió a Marcelo que estaba pegado a su banda. El brasileño se adentró apoyándose con una pared en Cristiano Ronaldo para después regatear a Cris, dejar tumbado a Lovren y superar al cancerbero Lloris. Jugadón del lateral carioca que encarrilaba la soñada clasificación a cuartos de final.

A punto estuvo de llegar el segundo en el 40’ de no ser porque Lloris despejó a córner el remate de Benzema. Precisamente el francés logró marcar un minuto después pero la jugada estaba ya anulada por un claro fuera de juego del delantero madridista nacido en Lyon.

Faltaba un minuto para el descanso y saltaron las alarmas por un golpe que recibió Marcelo en su rodilla izquierda. El autor del primer gol tuvo que encarar la bocana de vestuarios antes que ninguno acompañado de las asistencias médicas.

En la segunda parte se certificó el pase

El entrenador galo Puel dispuso al autor del gol de la ida, Bafétimbi Gomis, en el césped en lugar del centrocampista Briand. Sabía que todas las opciones pasaban por conseguir un gol como visitantes.

El punto débil del Lyon seguía siendo el mismo que en la primera mitad, la banda derecha de Reveillere, y por ahí llegó la primera ocasión en las botas de Benzema.

En los primeros 10 minutos de la segunda parte, el balón no llegó apenas al campo del Real Madrid y se notaba en el ambiente que el segundo llegaría tarde o temprano.

Todo el estadio reclamó un dudoso penalti de Reveillere sobre Benzema en el 63’. El ariete merengue pudo desquitarse tan solo dos minutos después anotando el segundo gol. Fallo calamitoso de la defensa gala que dejó al 9 blanco solo delante del portero al que superó con un bonito caño.

El partido y la clasificación estaban casi sentenciados y el Bernabéu subió los decibelios a sabiendas de que no se iban a repetir las películas ya vistas ante Juventus (2005), Arsenal (2006), Bayern de Múnich (2007), Roma (2008), Liverpool (2009) o el propio Lyon (2010).

El gol y el aliento de la grada dejaron noqueados al Olympique y solo Lloris, que se lució en un disparo de Benzema, mantuvo la dignidad de un equipo al que el paso de los minutos no hacía otra cosa que perjudicarle.

Mourinho respiraba tranquilo y decidió dar descanso de nuevo a Cristiano Ronaldo que dejó su puesto a Emanuel Adebayor en el minuto 73.

El tercer gol que cerró la cuenta fue obra de Di María en el 75’. De nuevo un jugador merengue se plantaba solo delante de la portería gala tras un fallo de los visitantes y finalizaba de la misma manera, en gol gracias a una vaselina que sorteó al cancerbero.

Se había ido CR7 y el descanso y la ovación llegarían después del tercer tanto para Di María (sustituido en el 78’ por Granero) y para Benzema (sustituido en el 84’ por Lass). Ambos se perdieron a Pepe jugándose la expulsión hasta en dos ocasiones, primero clavándole los tacos a Lisandro y después con una agresión a Cissokho a falta de cinco minutos para el final. Una historia demasiadas veces vistas en los 100 partidos que el luso ha cumplido como madridista en cuatro temporadas.

Llegó por fin el pitido final de Skomina y los jugadores pudieron celebrar una clasificación muy deseada en Chamartín. Un pase a cuartos que se le resistió a Luxemburgo, López Caro, Capello, Schuster, Juande Ramos y Pellegrini; pero que para llevarlo a cabo fue precisamente fichado el actual entrenador, José Mourinho.