Rumanía presenta la voz especial y única del contratenor Cezar, que sorprende con los giros que es capaz de hacer en "It's my life" ("Es mi vida"). Él solo llena el escenario. Su atuendo es muy barroco. De repente, salen tres bailarines, escondidos bajo una tela roja, que pasa a ser el color dominante. Actuación con gran dramatismo para señalar que "El amor hace que mi vida sea completa", una de las cosas que nos canta Cezar.
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